EL PAN PERFECTO

LA BIBLIA NOS HABLA:

“…no os conforméis a este siglo, sino que os transforméis por la renovación de la mente, para que sepáis discernir cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, lo que es agradable, lo que es perfecto.” 

(Romanos 12:2) BIBLIA NACAR COLUNGA

En este día quisiera hablarle, con la ayuda del Señor, de la perfección, pero antes permítame decirle: que es ilógico hasta cierto punto que un imperfecto les hable de la perfección… Sin embargo como dijo Martin Luther King, Jr. en su discurso en Washington, en el año de 1963: Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo: “Afirmamos que estas verdades son evidentes: que todos los hombres son creados iguales”. En otras palabras, sueño que se termine la persecución racial en los Estados Unidos de Norte América, sueño que todas las razas tengamos los mismos derechos, pero el punto es que yo Juan Carlos Bonilla Guerrero, también tengo un sueño y mi sueño es que usted y yo seamos perfectos, “…Estaré satisfecho, dijo el salmista, hasta que despierte a tu semejanza.”, ver Salmos 17:15 RVR 1960. Esto nos deja ver, en primer lugar: que David no soñaba con ser rey sino en ser semejante a Jehová… y en segundo lugar, nos deja ver que la única vía que existe para ser semejante a Jehová es despertar y reposar como lo hacía el rey David… Lo que estoy tratando de decir es que ese sueño es el sueño de la llamada muerte, muerte en Cristo, es decir que usted y yo nos acostamos, nos dormimos y nos levantamos, porque el Señor nos sustenta, quiere decir que a nosotros nos llevaron al cementerio, nos metieron a la fosa y nos echaron tierra, pero resucitamos porque el Señor nos sustenta… pero el punto es que yo al igual que el salmista, sueño que antes del periodo final de nuestra vida nos parezcamos a nuestro Señor Jesucristo, es decir que seamos perfectos… Y ESE ES EL PLAN DE DIOS, porque la Palabra dice, en primer lugar: que “nosotros estamos predestinados a ser hechos conforme a la imagen del Hijo de Dios.”, ver Romanos 8:29... y en segundo lugar, nos dice en el libro de Mateo, en el capítulo 5:48 RVR 1960: que “nosotros tenemos que ser perfectos como nuestro Padre que está en los cielos es perfecto.”. Eso quiere decir que nosotros estamos marcados para ser perfectos ¿Entonces mi sueño no es una locura, mi sueño no es solamente un sueño? El problema es que muchas personas, NO pueden soñar con el sueño del salmista y mucho menos con mi sueño, porque permanecen en cautiverio, y es por eso que la Palabra, dice: “Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. Entonces nuestra boca se llenará de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con éstos.”, ver Salmos 126:1 al 2 RVR 1960. Eso quiere decir que no se trata de soñar con tener una casa inteligente, que no se trate de soñar con tener un coche último modelo, que no se trata de soñar con tener mucho dinero, es decir que no debemos de soñar solamente con las cosas terrenales, porque las cosas terrenales vendrán como consecuencia de estar buscando primeramente el reino de Dios y su justicia…”, ver Mateo 6:33 RVR 1960, y es por eso que el apóstol Juan nos dice: “Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.”, ver Tercera de Juan 1:2 RVR 1960, pero el punto es que usted y yo debemos de soñar con las cosas que el Señor quiere que soñemos, y dentro de esas cosas se encuentra la perfección… soñemos con ser perfectos, y no paremos, y sigamos soñando... Lo que estoy tratando de decir, en primer lugar, es que la perfección no es un acto, porque el acto se va a dar cuando seamos transformados, es decir al final de nuestros días, pero el punto es que la perfección en estos tiempos es progresiva y es por eso que la Palabra nos dice en el libro de Romanos, en el capítulo 12:2 RVC: “…no adopten las costumbres de este mundo, sino transfórmense por medio de la renovación de su mente…”. Eso quiere decir que hoy tenemos que tomar un pedacito de esa transformación, y mañana tenemos que tomar otro pedacito de esa transformación, y pasado mañana tenemos que tomar otro pedacito de esa transformación, y entonces se cumplirá en nosotros lo que dice el libro del salmista, en el capítulo 84:7: “irán de chayil en chayil (H 2428), es decir que iremos de poder en poder, y veremos a Dios en Sion.”, y por eso se cumplirá aquel versículo, que dice: “…seremos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.”, ver Segunda de Corintios 3:18 RVR 1960… y en segundo lugar, permítame decirle, que el sueño de la perfección traerá encontronazos a nuestra vida ¿Por qué razón? Porque ese sueño nos va a revelar que somos imperfectos, SI SOMOS SINCEROS ¿Por qué razón? Porque nos hará ver, que aún no podemos controlar nuestro carácter, que aún tenemos pensamientos tenebrosos y oscuros… hermano disculpe, ¿si así es la cosa, entonces qué tipo de cristiano somos, hipócritas? NO, lo que sucede es que usted y yo somos cristianos en construcción (Aquí no es la Municipalidad trabajando por nosotros sino que es el Señor trabajando por nosotros, por eso en este momento le pido a mi Dios que es su Dios, que nos ayude hacer perfectos), por eso déjeme decirle, que nosotros tenemos que participar de la cena del Señor dignamente ¿Por qué razón? Porque en la medida en que vayamos comiendo EL PAN PERFECTO con la Fe de que estamos haciendo una situación espiritual que tiene repercusión en lo material y en lo celestial, en esa medida vamos a ir obteniendo el beneficio que Dios quiere para nuestra vida… Lo que estoy tratando de decir es que si usted se opone a ser perfecto, Dios lo va a hacer pasar por el desierto ¿Por qué razón? Porque usted está predestinado a ser hecho conforme a la imagen de su Hijo… Quizás alguien se esté diciendo: hermano nos está amenazando, DE NINGUNA MANERA, lo que estoy diciendo es que cuando Dios se propone algo lo cumple, porque “Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta…”, ver Números 23:19… mire, se lo voy a plantear de la siguiente manera, ¿Qué pensaría usted de un cristiano que llegaba a la Iglesia de Cristo a predicar, a alabar, a servir, a ofrendar y de repente cae en un tipo de aberración sexual que se manifiesta públicamente? ¿Qué tendríamos que hacer con esa persona? La Palabra relata en el libro de Primera de Corintios, en el capítulo 5:1 al 5 NTV, que los hermanos de la Iglesia de los corintios se la pasaban orando por un hombre que vivía en pecado con su madrastra, Pues yo, por mi parte, dice el apóstol Pablo: “Aunque no estoy con ustedes en persona, sí lo estoy en el Espíritu; y como si estuviera ahí, ya emití mi juicio sobre ese hombre en el nombre del Señor Jesús. Ustedes deben convocar a una reunión en la iglesia, y yo estaré presente en espíritu, igual que el poder de nuestro Señor. Entonces deben expulsar a ese hombre y entregárselo a Satanás, para que su naturaleza pecaminosa sea destruida y él mismo sea salvo el día que el Señor vuelva.”. En otras palabras, lo que les está diciendo el apóstol Pablo a los corintios, es: háganlo ceviche y no se lo den a comer a los perros, aunque la Palabra dice: que los perros se comieron a Jezabel, pero dejaron el cráneo, las manos y los pies, porque hasta los perros abominaban los pensamientos, las obras y el caminar de Jezabel, ver Segunda de Reyes 9:34 al 35… Lo que estoy diciendo es que esa persona se merecía la muerte y muerte eterna, pero sabe lo que dice el apóstol Pablo: al tal entréguenselo a satanás para la destrucción de su carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús ¿Qué está diciendo el apóstol Pablo? Que Dios propuso en su corazón que iba a hacer perfecto a ese hombre, por eso les dijo: entreguen el cuerpo de ese hombre a satanás para que su espíritu se salve… Eso nos deja ver que si Dios estaba pensando en perfeccionar a ese candidato al show de Laura, usted que no es perfecto, usted que comete errores, usted que comete faltas, transgresiones, pecados e iniquidades también, pregunto: ¿Cree que Dios ya se decepcionó de usted? ¿Usted cree que Dios da por perdidos los casos? o que Dios diría: con este no puedo ¿Usted cree que Dios no puede con usted y conmigo? CLARO QUE PUEDE ¿Entonces que tengo que hacer para alcanzar la perfección, hermano Juan Carlos? Será que tengo que ayunar por cuarenta días, o será que tengo que orar hincado sobre maicillo, o será que me tengo que venir de rodillas desde mi casa hasta la Iglesia de Cristo… por favor hermano dígame lo que tengo que hacer, CREERLE A DIOS, porque la Palabra dice: que Abraham le creyó a Dios y por eso le imputaron la justicia divina y por eso lo llamaron amigo de Dios… Eso quiere decir que si usted y yo le creemos a Dios, la justicia divina caerá sobre nosotros y seremos amigos de Dios, y por eso podremos cantar aquel cántico, que dice: Amigo soy de Dios, Amigo soy de Dios, pero lo tremendo de esto es que existen muchos cristianos que cantan ese cantico y son amigos del mundo, y la Palabra dice: que “…si alguien quiere ser amigo del mundo, se hace enemigo de Dios.”, ver Santiago 4:4 NTV… Lo que estoy tratando de decir es que Dios nos da las herramientas para que podamos alcanzar la perfección, y que dentro de esas herramientas se encuentra la llenura del Espíritu Santo, la Fe y la santa cena, porque en la santa cena se encuentra el pan, es decir el cuerpo de Cristo, es decir lo perfecto, por eso abramos nuestras Biblia en el libro de Levítico, en el capítulo 3:16, para que miremos lo que representa el pan, es decir el cuerpo de Cristo Jesús.

“Y el sacerdote los quemará sobre el altar como alimento; es ofrenda encendida como aroma agradable. Toda la grasa es del SEÑOR.”

Cuando leemos el capítulo 3 del libro de Levítico, nos damos cuenta que en este versículo se está hablando de las ofrendas de paz y que dentro de las ofrendas de paz se encuentra el cordero… Lo interesante de esto es que la Biblia de las Américas en este versículo 16, dice: Y el sacerdote los quemará sobre el altar como alimento, y el Hebreo dice: el sacerdote los quemará sobre el altar como Lechem (H 3899), y Lechem significa: pan, comida y grano, pero lo tremendo de esto es que Jesús dijo y aun nos sigue diciendo en el libro de Juan, en el capítulo 6:35: “Yo soy el pan de la vida; el que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed.”. Eso quiere decir que el cordero es pan, y que la mayoría de los hebreos no entendieron que Jesús era el Cordero, que Jesús era el pan que descendió del cielo, que Jesús era el pan de vida eterna, hasta que un día el mensajero, el que preparaba el camino del Señor dijo y aun nos sigue diciendo: “…He ahí el Cordero de Dios...”, ver Juan 1:29. En otras palabras, lo que les estaba diciendo Juan el Bautista a los hebreos, es: ustedes por aproximadamente 2000 años han estado sacrificando corderos para que sus pecados sean cubiertos, pero ahora Dios nos a mandado a su Cordero para que cuando sea sacrificado ese Cordero sus pecados y mis pecados ya no sean cubiertos, sino quitados, He ahí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, y por si fuera poco al día siguiente Juan el Bautista vio que venía Jesús hacia él, y dijo: “He ahí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.”, ver Juan 1:19. Lo tremendo de esto es que Jesús decía que Él era un hombre y Juan el Bautista decía que Jesús era un Cordero, pero el punto es que el libro de Levítico, en el capítulo 3:16, nos dice, en primer lugar: que el Cordero es el pan… y en segundo lugar, nos dice: que el Cordero es una ofrenda “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna.”, ver Juan 3:16. Eso quiere decir que Dios ofrendó y cuando ofrendó no sacó su billetera, sino que sacó de su corazón lo que más amaba y se lo dio al mundo, es decir a usted y a mí, por eso déjeme decirle, que rechazar a Cristo es el pecado más grande que puede existir, NO TIENE EL PERDÓN DE DIOS, pero el punto es que Levítico 3:16 dice: Lechem, y Juan el Bautista dice: He ahí el Cordero de Dios, y de repente el Señor Jesucristo se aparece por ahí, y dice: “Yo soy el pan de la vida.”, ver Juan 6:48, ¿Entonces en qué quedamos hermano Juan Carlos, en que Jesús es el Cordero o en que Jesús es el pan de la vida? Yo soy el pan de la vida. Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y se murieron, pero mi Padre que está en los cielos y en todo lugar les ha dado el verdadero pan, les ha dado el pan de la vida… Eso es lo que les estaba diciendo el Señor Jesucristo a los judíos. Eso es lo que nos está diciendo nuestro Señor Jesucristo ¿Por qué? Porque solo en Él se encuentra la vida eterna… Eso quiere decir, en primer lugar: que el pan perfecto da vida… y en segundo lugar: que el pan de vida nos traslada perfección, por eso déjeme decirle: NO dejemos de participar de la mesa del Señor dignamente, porque el pan perfecto nos traerá vida, fortaleza y sanidad, ver Primera de Corintios 11:29 al 30, Amén.

Ahora, miremos Números capítulo 4:7 BIBLIA NACAR COLUNGA.

“Tenderán sobre la mesa de los panes de la proposición una tela de jacinto y pondrán encima de ellos los platos, los cálices, las cazoletas y los vasos de las libaciones; el pan perpetuo irá sobre ella.”

Eso quiere decir que EL PAN PERFECTO, ES PERPETUO. Lo que estoy tratando de decir es que usted y yo debemos de estar consciente que cuando entramos al reino de los cielos a través de nuestro Señor Jesucristo, USTED Y YO NO PODEMOS MORIR, aunque nos tengan que enterrar, NO MORIMOS, y esto nuestro Señor Jesucristo nos lo afirma diciendo: “…Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí vivirá, aunque muera; y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. ¿Crees esto?”, ver Juan 11:25 al 26 NVI. Lo lamentable de esto es que existen muchas personas y personas cristianas que aún no han comprendido lo que significa realmente la vida eterna, claro que hay repercusiones aquí en la tierra, porque el hecho que uno se muera acarrean aflicciones… Por ejemplo: adonde lo vamos a enterrar, cuánto nos costará el entierro y en donde dejamos las lágrimas de los seres queridos y las sonrisas a escondidas de los enemigos, que dicen: como lo lamento, pero el otro yo del doctor merengue llora de felicidad… pero esas repercusiones son aquí en la tierra ¿Pero qué pasa con el que murió en Cristo? ¿Qué pasa con el que durmió en Cristo? ¿Qué pasa con el que ha nacido de nuevo? NUNCA MORIRÁ. Lo que estoy diciendo es que la muerte no tiene poder sobre la muerte, lo más que puede hacer la muerte es afectar el cuerpo, porque el Señor Jesucristo ya venció a la muerte en la cruz del calvario, y es por eso que usted y yo tenemos vida y vida eterna… Esto me causa felicidad, porque sé que sé que aunque yo me muera no me muero, probablemente pueda dormir y al dormir me llevaran al cementerio y me echarme no se cuanta tierra encima, pero sé que sé que mi espíritu no está muerto, ver Eclesiastés 12:7, que mi alma no está muerta, ver Lucas 16:22, y que a mi cuerpo el Señor Jesucristo lo levantará el día de la manifestación, es decir el día del arrebatamiento, ver Primera de Tesalonicenses 4:13 al 17. Lo que estoy tratando de decir es que ya NO nos tenemos que preocupar por la muerte, por la pobreza y mucho menos por las enfermedades ¿Por qué razón? Porque “Cristo nos redimió de la maldición de la Ley haciéndose por nosotros maldición, pues escrito está: “Maldito todo el que es colgado de un madero,””, ver Gálatas 3:13 BIBLIA NACAR COLUNGA, por eso déjeme decirle, en primer lugar: que el pan perfecto nos da la perpetuidad… y en segundo lugar: que nosotros debemos de participar de la mesa del Señor dignamente, porque Jesucristo es el pan perfecto, porque Jesucristo es el pan de la vida, porque Jesucristo es el único que nos puede dar la perpetuidad, Aleluya.

Por eso quisiera terminar esta enseñanza del Señor diciendo, en primer lugar: la prosperidad para mí no es tener una casa, no es tener un coche, no es tener una cuenta bancaria, no es viajar por todo el mundo… La prosperidad para mí es que mi espíritu y mi alma estén prosperados, porque solo así seré prosperado en todas las cosas, y tendré salud, y tendré una comunión extraordinaria con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo… Entonces tengo un sueño y no lo voy a perder… y en segundo lugar: que cuando usted se coma el pan se estará comiendo EL PAN PERFECTO ¿Usted sabe qué hace el pan en el sentido simbólico? Lo que hace es que cuando el pan entra a su estómago, espiritualmente hablando, comienza a arrancar las cosas malas que se encuentran en su alma… Eso quiere decir que su alma sigue en el proceso de muerte, MUERTE AL YO, y  cuando está muerto en la porción que le tocaba morir entonces viene la copa, viene el vino, viene la sangre… Dice la Palabra en el libro de Génesis, en el capítulo 40:20 al 23, que el panadero murió y que el copero vivió… Eso quiere decir que el pan significa muerte y que el vino significa vida, pero el punto es que cuando usted se coma el pan de la vida, el pan perfecto, su alma morirá y una vez que haya muerto su alma tomará la copa y se beberá el vino y al beberse el vino, el vino le dará vida, es decir que resucitará a NOVEDAD DE VIDA ¿Por qué razón? Porque el pan es sublime, porque el pan es precioso, porque el pan es de victoria, porque el pan es de risas, porque el pan es de lágrimas, porque el pan es de alegría, porque el pan es de tristeza, porque el pan es de liberalidad, porque el pan es de sanidad… Lo que estoy tratando de decir es que EL PAN PERFECTO, actuará en nosotros dependiendo de nuestras necesidades ¿Por qué razón? Porque “…Jesucristo es el pan que desciende del cielo, para que el que coma de él, no muera, sino que tenga vida, y vida eterna, ¿Crees esto?”, ver Juan 6:47 al 50, Gloria a Dios...

01 de Abril de 2017

Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo