EL REINO DE DIOS

LA BIBLIA NOS HABLA:

“No temas, rebaño pequeño, porque vuestro Padre ha decidido daros el reino.” (Lucas 12:32)

En este día quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Señor de señores diciendo, que el reino de Dios es el inicio de la vida cristiana (Nuevo nacimiento), y fue ahí en donde nuestro Señor y Dios abrió nuestros ojos para que pudiéramos ver el mundo espiritual... El mundo de las cosas que NO se ven; El mundo de lo imposible; El mundo de lo invisible y de lo invisible proviene la Fe y comienza la evolución de nuestra misma Fe... por eso es que dice la Palabra del Señor: “La Fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”, ver Hebreos 11:1... Hermano; Hermana, tenemos que evolucionar en nuestra Fe, y eso se llama: Círculo virtuoso, y fue por eso amado, que dijo el apóstol Pablo: “Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por Fe y para Fe, como está escrito: Mas el justo por la Fe vivirá.”, ver Romanos 1:17 RVR 1960, pero ese no es el punto, aunque es hermoso y precioso, el punto es que cuando nuestro Señor y Dios, permitió que naciéramos de nuevo, permitió que viéramos Su reino; Creímos y al creer vivificó nuestro Espíritu con el Espíritu de nuestro Señor Jesucristo y al vivificarlo se abrieron nuestros ojos espirituales, y logramos ver lo que no se ve, es decir: Lo invisible y lo imposible, ver Efesios 1:13 y Efesios 2:4 al 6, Amén.

Cuando se abrieron nuestros ojos espirituales logramos ver lo que no se ve y nuestro nombre fue inscrito en el libro de la vida del Cordero, que fue inmolado desde antes de la fundación del mundo, ver Primera de Pedro 1:20... Esto está tremendo y lo tremendo de esto amado, es que ahí comenzó nuestro caminar; Nacimos de nuevo, somos salvos e indiscutiblemente al convertirnos en salvos comenzó nuestra larga caminata gloriosa y peligrosa, y eso lo describe perfectamente bien el libro de san Juan, en el capítulo 8:31 al 33, en donde Jesús le habla a los judíos que ya habían creído en Él, diciendo: Ustedes en verdad no son libres y para ser libres necesitan evolucionar... Deben permanecer en mi palabra, porque mi palabra os hará mis discípulos y al ser mis discípulos conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres, ¿Y qué le contestaron ellos?... Somos descendientes de Abraham y nunca hemos sido esclavos de nadie; Ellos creyeron en Jesús, pero su religiosidad chocó con la nueva criatura Y al chocar con la nueva criatura terminaron rechazando el mensaje inicial (La salvación), y por eso el Señor Jesucristo les dice en el versículo 44 de ese mismo capítulo: Ustedes son hijos del diablo, porque desean y practican los deseos del diablo, y la palabra diablo proviene de la palabra griega Diabolos (G 1228), que significa: Calumniador, acusador, engañador y mentiroso, pero también significa: El que se opone a... Por ejemplo: Diablo es el que se opone a la verdad; Diablo es el que se opone a la luz... Diablo es el que se opone a lo digno, a lo honesto y a lo íntegro... Entre otros, pero el punto es que nosotros tenemos que evolucionar del Atrio al Lugar Santo y del Lugar Santo al Lugar Santísimo... Recuerde, que en el Atrio se ve el reino y comenzó nuestra gloriosa y maravillosa salvación, y que en el Lugar Santo se entra en el reino y que en el Lugar Santísimo se hereda, ¿El qué? El reino de Dios...

Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo, ver Mateo 25:34...

Hermano; Hermana, nuevamente le repito y no me cansaré de repetirle, porque para usted es motivo de seguridad, decía el apóstol Pablo, ver Filipenses 3:1: Tenemos que evolucionar, ¿Por qué?... Porque cuando uno NO evoluciona aunque no parezca involuciona en todos los órdenes de la vida... Por ejemplo: Si usted trabaja en la mercadotecnia y las gráficas de su empresa le muestran que usted está creciendo al 6% anual cuando el mercado está creciendo al 12% en ventas anuales... El mercado le está diciendo: Usted no está creciendo; Usted está involucionando, porque su crecimiento anual (Ganancias), no está de acuerdo al crecimiento anual del mercado... Lo que yo estoy tratando de decir es que no basta con llegar a la Iglesia de Cristo de vez en cuando o todos los domingos... Aceptar a Cristo es básico, pero no se puede quedar ahí... Tiene que evolucionar del Atrio, que sería ver y que es por Fe, ver Juan 3:3, al Lugar Santo, porque en el Lugar Santo se va a despojar de las estrategias y de todas las motivaciones humanas... Definitivamente, necesitamos la ministración y la impartición del Espíritu de Dios... Escuche: Sin Cristo nadie se puede salvar; Podrá ser muy religioso y podrá hacer buenas obras, pero sin Cristo nadie se salva y la salvación se logra en vida, y NO por medio del purgatorio; El que muere sin Cristo ya está condenado... por otro lado, el que muere con Cristo siendo un hijo pródigo es salvo, siempre y cuando no cometa un pecado que lleve a la muerte... Por ejemplo: La blasfemia contra el Espíritu Santo, ver Mateo 12:32 al 33 LBLA. 

Hermano; Hermana, necesitamos al Espíritu Santo para permanecer y continuar nuestra vida cristiana... Escuche: No podemos continuar y mucho menos culminar exitosamente nuestra carrera cristiana si no tenemos la llenura del Espíritu Santo y la llenura se obtiene en el Lugar Santo y SI usted es de los que aún NO han recibido el bautizo en agua y la llenura del Espíritu Santo... Consejo: Búsquelo con empeño y eficacia, porque el Espíritu Santo es el único que nos convencerá de pecado, de justicia y de juicio, ver Juan 16:8... Porque el Espíritu Santo es el único que nos guiará a toda la verdad, ver Juan 16:13... Porque el Espíritu Santo es el único que nos hará verdaderamente libres, ver Juan 8:32... En otras palabras, busquemos con ahínco la llenura del Espíritu Santo, porque la llenura nos guiará, nos direccionará, nos iluminará y gobernará nuestra vida, ver Juan 3:5… por eso, me pregunto y le pregunto amado:

¿Será importante, la llenura del Espíritu Santo y más aún en estos tiempos que son finales?

Nuestro Señor Jesucristo dijo y aun nos sigue diciendo: Lo voy a parafrasear: Es urgente que lleven el mensaje de salvación hasta los confines de la tierra, para que Yo haga la obra, pero no vayan si no están llenos del Espíritu Santo, ver Hechos 1:8, pero ese es el segundo paso, por eso tienen que evolucionar del Atrio al Lugar Santo y del Lugar Santo al Lugar Santísimo, porque en el Lugar Santísimo se hereda, ¿El qué? El reino de los cielos... Dice la Palabra de Dios en el libro de Mateo capítulo 5:20: “Porque os digo que si vuestra justicia no supera la de los escribas y los fariseos (La de los religiosos que no han nacido de agua y del Espíritu), no entraréis en el reino de los cielos.”... Entre paréntesis, este grupo de personas pueden llegar a ser salvos, pero NO entrarán; Ellos verán el reino... Ejemplo Bíblico: Apocalipsis capítulo 22:15... Este versículo nos muestra que Dios NO envió al lago de fuego a este grupo de personas que estaba conformado por perros, hechiceros, inmorales, asesinos, idólatras y todo el que ama y practica la mentira, ¿Por qué? Porque estaban inscritos en el libro de la vida, pero a sus primos lejanos SI los envió, ¿Por qué? Porque NO se encontraban inscritos en el libro de la vida, ver Apocalipsis 20:15, pero ese no es el punto, el punto es que después del período Mileneal (Imposición del gobierno de Cristo), van a existir cristianos, lamentablemente, que verán, pero NO entrarán en el reino de los cielos...

Y dice la Palabra en el libro de Mateo, en el capítulo 7:21: “No todo el que me dice: “Señor, Señor”. Entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.”… Ojo, no estoy hablando de salvación; Estoy hablando de entrar al reino de los cielos y digo esto, porque algunos malinterpretan este versículo, diciendo: Todo el que me dice: “Señor, Señor”, se salvará y NO es así, porque ahí dice parafraseando: Todo el que me dice: “Señor, Señor” Se puede salvar y puede ver, pero no entrará en el reino de los cielos... Ejemplo Bíblico: Moisés y los diez espías que fueron a reconocer la tierra prometida; Ellos vieron, pero no entraron y los únicos que entraron fueron: Caleb y Josué hijo de Nun, pero el punto es que el que haga la voluntad del Padre que está en los cielos; Ese va a entrar en el reino de los cielos... y es aquí en donde surge la pregunta de los 20 pesos: ¿Qué necesitamos hacer para conocer la voluntad de nuestro Padre celestial? Renovar nuestra mente, es decir: Cambiar nuestra manera de pensar, ver Romanos 12:12 NTV... Y eso solo se puede lograr por medio del bautizo y de la llenura del Espíritu Santo, ver Tito 3:5...

Hermano; Hermana, tenemos que conocer cuál es la voluntad del Padre para nuestra vida... Por eso permítame decirle, en primer lugar, que el Señor tiene una voluntad generalizada para nuestras vidas... Por ejemplo: La santificación, es decir, abstenernos de inmoralidad, ver Primera de Tesalonicenses 4:3 al 5… y en segundo lugar, que el Señor tiene una voluntad individual para nuestras vidas... Por ejemplo: Tal vez alguien quiera relocalizarse, es decir: Cambiar de país y Dios dice: Esa no es mi voluntad, pero él dice: Esta bien, pero yo y mi casa nos iremos; Se van y se quedan en el desierto, y no estoy hablando de un desierto espiritual...

Entonces, tenemos que averiguar para conocer: Cuál es la voluntad del Padre para nuestra vida, ¿Para qué? Para ir en pos de ella. Ah... Y su voluntad, La cual es buena, agradable y perfecta, también está presente en la sabia escogencia de un buen esposo o esposa, o de una carrera universitaria, o de un trabajo...

El Señor le dijo a Elías tisbita: “Sal de aquí y dirígete hacia el oriente, y escóndete junto al arroyo Querit, que está al oriente del Jordán. Y beberás del arroyo y he ordenado a los cuervos que te sustenten allí... y dice la Palabra que los cuervos le traían pan y carne por la mañana, y pan y carne al atardecer, y él bebía del arroyo.”, ver Primera de Reyes 17:3 al 6... Pero, ¿Por qué le sucedió eso a Elías? Porque Elías se encontraba bajo la voluntad de Dios... por otro lado, nosotros tenemos nuestra propia voluntad, pero también la tenemos llena con una pizca de ego, de orgullo, de arrogancia, de soberbia y de prepotencia; Entre otros...

 ¿Qué le quiero decir amado hermano?

Que el hombre más grande que ha vivido sobre la faz de la tierra, se llamó: Jesús y que Cristo Jesús tenía Su propia voluntad, Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa; Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya, ver Lucas 22:42...

Nosotros tenemos nuestra propia voluntad...

Nosotros tenemos un tema en nuestro corazón...

Nosotros tenemos un sueño en nuestro corazón... Pero ¿Será qué eso es lo que desea Dios para nuestra preciosa vida?... por eso consejo: No busquemos nuestras propias metas, No busquemos nuestros propios sueños, mejor durmamos en el Señor nuestro Dios para que cuando despertemos, Él nos ayude a cumplir nuestras metas y sueños... y eso fue lo que le sucedió a Adán... Dice la Palabra que Dios durmió a Adán, y cuando despertó tenía a su lado a una bella mujer, ver Génesis 2:21 al 22... por eso consejo: Reposemos en el Señor para que no nos suceda lo que le sucedió a Sansón, ¿Y qué le sucedió a Sansón? Que se durmió entre las piernas de Dalila y por eso perdió la visión, la revelación y su fortaleza, y hasta su vida...

Hermano; Hermana, tenemos que buscar, y hallar, y seguir la voluntad de Dios, porque si no la seguimos no podremos entrar en su reino... por eso abramos nuestras Biblias en el libro de Mateo, en el capítulo 18:3, para que el Señor nos muestre lo que tenemos que hacer... para que el Señor nos muestre lo que necesitamos hacer para entrar en el reino de los cielos...

 “Y dijo: En verdad os digo que si no os convertís y os hacéis como niños, no entrareis en el reino de los cielos.”

Según ese versículo pregunto: ¿Qué necesitamos para entrar al reino de los cielos? En primer lugar: La conversión, pero antes de la conversión está el arrepentimiento, y arrepentimiento significa: Cambia tu manera de pensar, pero también significa: Cambia tu manera de actuar, pero el cambio de actuar tienen que ser acorde con el de pensar, porque si no se convierte en legalismo... Haz esto, esto y aquello, y lo hace, porque lo están viendo, pero por dentro no lo quiere hacer, Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago, Decía el apóstol Pablo, ver Romanos 7:19 RVR 1960… Y en segundo lugar, ese versículo nos deja ver claramente, que SI nosotros queremos entrar en el reino de los cielos necesitamos hacernos como los niños, ¿Y cómo son los niños? Pregunto... Los niños son inocentes, son dependientes, no guardan rencor (Saben reconciliarse fácilmente), y sobre todo los niños: Creen; Creen en lo imposible, creen en lo invisible, y así debemos ser, y así debemos vivir...

Hermano; Hermana, tenemos que convertirnos y ser como los niños, aunque envejezcamos por fuera, ¿Para qué? Para que entremos en el reino de los cielos, y los niños son inocentes y con su inocencia quebrantan muchos, pero muchos corazones... Esto me recuerda, que un día mi hijo Carlo Alessandro, me dijo: Papá quieres algo de la gusgueria... Un vaso loco, le dije, y él dijo: Mamá aquí tengo dinero para que le compremos el vaso loco a mi papá...

¡Me quebrantó; Me rompió!... ¡Me conmovió; Me sacudió!

Por eso Señor te damos gracias por todos los niños, y te pedimos en el nombre que es sobre todo nombre, ver Filipenses 2:9, que bendigas a todos los niños de todo el mundo... Guárdalos bajo tu sombra oh Omnipotente y se su refugio y su fortaleza, ver Salmos 91:1 al 2. Amén, Amén y Amén...

Entonces, ¿Qué tenemos que hacer para entrar al reino de los cielos? Convertirnos en niños, porque al convertirnos en niños se nos hará más fácil el arrepentimiento y la conversión, y la conversión y el arrepentimiento son parte de la llave maestra, que abre la puerta que conduce al camino estrecho; Que abre la puerta para entrar en el reino de los cielos, Amén...

Ahora, miremos Mateo capítulo 19:23 RVR 1960.

“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos.”

Este versículo lo mal interpretan algunas personas, ellos dicen: Ningún rico se salvará... Y no es así, porque ese versículo NO está hablando de salvación... Este versículo está hablando DE EVOLUCIÓN: Es difícil que un rico entre en el reino de los cielos... Y fue por eso que el perito arquitecto de la Iglesia de Cristo Jesús le dijo a Timoteo, y como Pablo le habla a Timoteo para que entiendan los Timoteos, nos dice: Timoteos, enséñenles a los ricos que hagan el bien, que sean ricos en buenas obras, generosos y prontos para compartir, ver Primera de Timoteo 6:18... Normalmente, las personas que NO tienen mucho se sujetan y las que tienen mucho NO, y no estoy hablando solamente de riqueza de dinero, sino de ricos en diferentes cosas... Por ejemplo: Ricos en conocimiento, ricos en sabiduría, ricos en revelación, ricos en misericordia, por eso dice la Palabra: “A los hambrientos los colmó de bienes, y a los ricos los despidió con las manos vacías.”, ver Lucas 1:53 NVI... por eso me pregunto y le pregunto: ¿Qué tenemos que hacer para que nuestro Señor nos llene de los bienes antes mencionados y que son tan necesarios e indispensables para entrar en el reino de los cielos? Despojarnos de todo lo que nos estorba y del pecado que tan fácilmente nos enreda, para correr con paciencia la carrera que tenemos por delante, ver Hebreos 12:1 DHH y LBLA... En otras palabras: Humillarnos, es decir: Arrastrarnos, como lo hizo la mujer que padecía de flujo de sangre, ¿O qué cree usted, que hizo esa mujer para ser sanada? Usted cree que dijo: Con permiso, déjenme pasar; Pedro me podrías llamar al Señor, por favor... NO; Ella se tiró al suelo, se arrastró, se humilló y quedó sana, “Se acercó a Jesús por detrás y tocó el borde de su manto, y al instante cesó el flujo de su sangre.”, ver Lucas 8:44... Entonces, que tenemos que hacer para entrar en el reino de los cielos: Humillarnos; Ser humildes...

Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que Él os exalte a su debido tiempo, ver Primera de Pedro 5:6...

...Indiscutiblemente necesitamos comportarnos como lo hizo el hijo pródigo: Padre, yo “Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; Hazme como a uno de tus jornaleros.”, ver Lucas 15:19 RVR 1960... Por eso consejo: Humillémonos delante del Señor, porque al que se humilla delante del Señor no le toca humillarse delante de los hombres, porque Él honra a los que le honran, Y los que lo menosprecian serán tenidos en poco, ver Primera de Samuel 2:30...

Ahora, miremos Segunda de Pedro capítulo 1:11:    

“Pues de esta manera os será concedida ampliamente la entrada al reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.”

Para que podamos comprender este versículo leamos el contexto:

Por esta razón también, obrando con toda diligencia, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento; Al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, perseverancia, y a la perseverancia, piedad, a la piedad, fraternidad y a la fraternidad, amor. Pues estas virtudes, al estar en vosotros y al abundar, no os dejarán ociosos ni estériles en el verdadero conocimiento de nuestro Señor Jesucristo... Y el versículo 11 dice: De esta manera os será concedida ampliamente la entrada al reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.”, ver Segunda de Pedro 1:5 al 11...

Entonces, ¿Qué tenemos que hacer para entrar en el reino de los cielos? Bueno, aparte de ser humildes, y de hacernos como los niños, y de hacer la voluntad de Dios, ¿Qué tenemos que hacer, según esos versos? Evolucionar, ¿Y cómo vamos a evolucionar? Haciendo Rhéma (G 4487); Vida en nosotros los ocho elementos que menciona el apóstol Pedro, llámense: Fe, virtud, conocimiento, dominio propio, perseverancia, piedad, fraternidad y amor, Amén.

Entendieron... Entonces, si entendieron, continuemos: La salvación es personal y nadie se salva, sino es por medio de Jesús, ver Juan 14:6... La salvación es por gracia, pero tenemos que evolucionar del Atrio al Lugar Santo y del Lugar Santo al Lugar Santísimo, porque en el Atrio: Se recibe la salvación y se ve el reino, y en el Lugar Santo: Se entra en el reino y en el Lugar Santísimo se hereda el reino de los cielos... por eso me pregunto y le pregunto:

¿Cuántos queremos heredar el reino de los cielos?

Entonces, abramos nuestras Biblias en el libro de Mateo capítulo 25:24, para que el Señor nos muestre lo que tenemos que buscar y realizar para, que podamos heredar el reino de Dios:

“Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.” (Mateo 25:34)

Y después dice: Porque tuve hambre, y me disteis de comer; Tuve sed, y me disteis de beber; Fui forastero, y me recibisteis; Estaba desnudo, y me vestisteis; Enfermo, y me visitasteis; En la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor, ¿Cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer, o sediento, y te dimos de beber?, ¿Y cuándo te vimos como forastero, y te recibimos, o desnudo, y te vestimos?, ¿Y cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? Respondiendo el Rey, les dirá: En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí me lo hicisteis, ver Mateo 25:35 al 40...

Permítame explicarle estos versículos: Todos los cristianos que nunca le han dado de comer a un hambriento, Ni de beber a un sediento, Ni de hospedar a un forastero, Ni de vestir a un desnudo, Ni de visitar a un enfermo o a algún preso; No se perderán, porque creyeron, porque nacieron de nuevo... Pero usted cree, ¿Qué heredarán la plenitud de la herencia que Dios tenía para ellos? Pues no, ¿Por qué? Porque la herencia se obtiene haciendo obras de Fe… Obras que brotan de un corazón sensible, que fue despertado, porque buscó con empeño y eficacia al Señor y Dios. Y cuando sintió estaba conmovido por la necesidad de los demás...

Nadie es tan pobre, que no tenga para ayudar a otros...

Nadie es tan pobre, que no pueda regalar 10 pesos, aunque yo sé, que para algunos es una fortuna, pero SI lo hacemos, el Señor nuestro Dios, nos lo va a anotar en el precioso libro de las obras, ver Apocalipsis 20:12... Y recuerde, que el que se apiada del pobre le presta al Señor, y Él lo recompensará por su buena obra, ver Proverbios 19:17, Amén...

Pero también recuerde:

…Si hay algún menesteroso contigo, uno de tus hermanos, No endurezcas tu corazón, LBLA, ...Mejor ayuden siempre al pobre, y háganlo con alegría. Si lo hacen, les irá bien y Dios los bendecirá en todo lo que hagan, es decir: En todo lo que emprendan y en su trabajo. En este mundo siempre habrá gente pobre. Por eso les ordeno que sean generosos con la gente pobre y necesitada del país, nos dice Dios, ver Deuteronomio 15: 1 y 10 al 11 TLA…

Entonces, ¿Quiénes son los que heredan el reino de los cielos? Los que hacen buenas acciones... Los que hacen buenas obras... Hermano; Hermana, la salvación es por gracia, pero SI usted no hace obras de Fe NO podrá heredar el reino de los cielos...   

Ahora, miremos Primera de Corintios capítulo 6:9 al 10: 

“¿O no sabéis que los injustos no heredaran el reino de Dios? No os dejéis engañar: Ni los inmorales, ni los idolatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los maldicientes, ni los que insultan, ni los que murmuran, ni los estafadores heredaran el reino de Dios.”

Como usted puede ver y leer, muchas, pero muchas personas y entre ellas, lamentablemente cristianas, no heredarán el reino de los cielos, pero eso no quiere decir que no se salvarán... Cuando le leyeron el currículo al ex ladrón de la cruz en la entrada del paraíso, le preguntaron: ¿A qué te dedicas? Soy ladrón... Pero aceptaste a Cristo como tu Señor y salvador personal; Si, ver Romanos 10:9 al 10, ¿Y después seguiste robando? No, me mataron... Entra en el gozo de tu Señor, porque fuiste perdonado, ver Mateo 25:21, ¿Qué le quiero decir amado? Que la salvación es por gracia y la herencia se obtiene por hacer obras de Fe, pero para eso se necesita primero: Entrar en el reino de Dios, porque “Entrar” Es la llave que nos ayudará a despojarnos de las estrategias y de todas las motivaciones humanas... Definitivamente, necesitamos, la ministración y la impartición del Espíritu Santo... Escuche: Sin Cristo nadie se salva; Podrá hacer buenas obras, podrá ser generoso y podrá ser pronto a compartir, pero sin Cristo nadie se salva y la salvación hermano, se logra en vida... El que muere sin Cristo, lamentablemente, ya está condenado al lago de fuego... por otro lado, el que muere con Cristo siendo un hijo pródigo o rebelde es salvo siempre y cuando NO cometa un pecado que lleve a la muerte, ver Primera de Juan 5:16... Él desobediente es salvo, pero no hereda, ¿Y por qué digo eso? Porque dice la Palabra en el libro de Revelación: Bienaventurados los que lavan sus vestiduras para entrar por las puertas a la ciudad; Afuera se quedaron los salvos que fueron rebeldes, es decir: Los perros, los que practican la brujería, los que cometen inmoralidades sexuales, los asesinos, los que rinden culto a los ídolos y todos los que se deleitan en vivir una mentira, ver Apocalipsis 22:15 TLA... Como así hermano, SI el libro de Apocalipsis nos deja ver en el capítulo 20:15 y en el capítulo 21:8, que todos los antes mencionados fueron arrojados al lago de fuego, es decir: A la segunda muerte... Cierto, pero también es cierto que sus primos lejanos, es decir: Los pródigos o desobedientes, y que están conformados por perros, hechiceros, inmorales, asesinos, idólatras y todo el que ama y practica la mentira, se salvaron; Vieron el reino de los cielos, pero no entraron, ¿Por qué? Porque NO evolucionaron; Se quedaron en el Atrio, ver Apocalipsis capítulo 22:15.

…Todos los hijos pródigos o desobedientes, son salvos, pero no entrarán y mucho menos heredarán, lamentablemente, desafortunadamente, el reino de los cielos…

 ¿POR QUÉ?… Porque NO evolucionaron del Atrio al Lugar Santo y del Lugar Santo al Lugar Santísimo... Hermano; Hermana, nos vamos a llevar una tremenda sorpresa en el cielo… por eso consejo: No juzguemos la salvación de las personas, ¿Quién es salvo? Abstengámonos, porque no sabemos quién estará inscriptos en el libro de la vida, ver Apocalipsis 20:15 RVR 1960...

Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que yo, Juan Carlos Bonilla Guerrero, NO predico una religión, yo predico: El reino de los cielos y el reino de los cielos nos dice que todos los cristianos necesitamos evolucionar para entrar y heredar el reino de los cielos; La salvación o ver el reino de los cielos se obtiene por medio del Señor Jesucristo y la Biblia dice claramente: “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo.”, ver Apocalipsis 3:20.

Indiscutiblemente, necesitamos la llenura del Espíritu Santo para entrar y heredar el reino de los cielos... Entre paréntesis, SI usted es de los que no se ha bautizado aún en agua o no ha recibido el bautismo del Espíritu Santo, o ambos, ver Juan 3:3 al 5... Consejo: Búsquelo con ahínco... Necesitamos la llenura del Espíritu Santo, porque Él es el único que nos convencerá de pecado, de justicia y de juicio, ver Juan 16:8... Porque Él es el único que nos guiará a toda verdad, ver Juan 16:13... Porque Él es el único que nos hará verdaderamente libres, ver Juan 8:32… por eso consejo: Busquemos con empeño y eficacia la llenura del Espíritu Santo, porque Su llenura nos guiará, nos direccionará, nos iluminará y gobernará nuestra vida... Hermano; Hermana, pongamos en práctica esta maravillosa enseñanza del Señor para que entremos y heredemos todos los beneficios, es decir: Todas las bendiciones que Dios nos ha prometido en Su bendita Palabra, pero tenemos que saber, que para entrar y heredar NO tenemos que cumplir al 100 % necesariamente con todos los requisitos que son tan indispensables para entrar y heredar el reino de los cielos, sino todos estaríamos fuera de la herencia del reino de Dios... Y esto lo estableció Jesús en la parábola del sembrador:

He aquí, el sembrador salió a sembrar; Y al sembrar, parte de la semilla cayó junto al camino, y vinieron las aves y se la comieron. Otra parte cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra; Y enseguida brotó porque no tenía profundidad de tierra; Pero cuando salió el sol, se quemó; Y porque no tenía raíz, se secó. Otra parte cayó entre espinos; Y los espinos crecieron y la ahogaron. Y otra parte cayó en tierra buena y dio fruto, algunas semillas a ciento por uno, otras a sesenta y otras a treinta. El que tiene oídos para oír, que oiga lo que nos dice nuestro Señor, ver Mateo 13:3 al 9...

Por eso Señor, te pedimos y te suplicamos, en el nombre de Jesús, en este precioso día, que nos ayudes a entrar en Tu reino para que podamos heredar Tu glorioso y bendito reino...

Amén, Amén y Amén... ¡Alabado sea Tu santo y bendito nombre oh Señor!

29 de agosto de 2020