EN BUSCA DEL HUERTO, ¿Y QUÉ TENEMOS QUE BUSCAR?
LA
BIBLIA NOS HABLA:
22 de Diciembre de 2018
Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo
“Y plantó el Señor
Dios un huerto hacia el oriente, en Edén; y puso allí al hombre que había
formado.”
(Génesis 2:8) LBLA.
En este día quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo,
que Dios tenía un plan el cual NO lo varió antes de crear a la nueva humanidad…
Dios tenía un plan; No es que Dios haya tenido un plan A, o un plan B, o un
plan C… Dios tenía un plan aunque le haya fallado el hombre de Génesis capítulo
1:26 al 27, y el hombre de Génesis capítulo 2:7… Dios tenía un plan y los errores
que cometieron esos hombres NO quieren decir que hayan movido el plan que tenía
Dios desde el principio… Dios tenía un plan, y dijo: Sea la luz. Y hubo luz... Dios dijo: Que se separen las aguas de
las aguas y se separaron... Dios dijo: Que se separen las aguas de la tierra y que
se formen los océanos, los ríos y la tierra, y se formaron... Dios dijo: Que se
separe el día de la noche y se separaron... Dios dijo: Que se llene el cielo y la
tierra y las aguas de seres vivientes, y se llenaron... y cuando Dios dijo: Hagamos al hombre a nuestra imagen,
conforme a nuestra semejanza. No vaya a creer usted que el fracaso de ese
hombre movió el plan que tenía Dios DESDE EL PRINCIPIO, ver Génesis 1:1 al 27,
eso era parte del plan de Dios, ME ESTOY DANDO A ENTENDER. Entonces, continuemos...
Dios hizo al hombre de Génesis del capítulo 1:26 al 27, y ese hombre le falló y
al fallarle viene Dios en su plan, y se dice: Voy hacer a otro hombre, pero a
este NO lo voy a hacer (Asah, H 6213), sino que lo voy a formar (Yatsar, H
3335), del polvo de la tierra, ver
Génesis 2:7, pero NO lo voy a plantar en la tierra sino que le voy a crear un
lugar que se llame Edén para plantarlo en un Huerto para que lo cuide y se
alimente de todo lo que produzca ese Huerto… La alimentación que tenía ese
hombre era distinta a la del hombre de la tierra, es decir al hombre de Génesis
capítulo 1:26 al 27… Eso quiere decir que según lo que uno coma eso va a ser, espiritualmente
hablando… Por ejemplo: Si usted es de las personas que solamente se alimenta
con leche siendo cristiana, déjeme decirle: que usted es un niño o es un
carnal, ver Primera de Corintios 3:1 al 3, pero el punto es que Dios plantó en
el Huerto del Edén al hombre que formó para que lo cultivara, y se alimentara y
lo cuidara, ¿De qué? De los que ya estaban habitando la tierra, es decir de los
habitantes de Nod (Errantes), ver Génesis 4:16.
Entonces, el propósito de Dios era que Adán cuidara y sojuzgara el
Huerto, después el Edén, después la tierra y por último el Kosmos, ¿Y por qué
el Kosmos? Porque el Kosmos al igual que la tierra habían fallado, ¿Cuándo? Antes
de Génesis capítulo 1, es decir en Génesis capítulo 0, ¿Y quiénes fallaron? La
sabiduría que creó y Luzbel con sus ángeles, pero el punto es que el hombre que
formó Dios tenía que reconquistar lo que se había perdido, ¿Y que se había
perdido? La tierra y el Kosmos, pero para eso primero tenía que conquistar el
Huerto, después el Edén, después la tierra y una vez conquistada la tierra tenía
que salir al Kosmos como un vigilante… Ese era el plan de Dios y el plan de
Dios NO falló; El que falló fue el hombre. Entre paréntesis, al fallar el hombre
viene Dios y envía al postrer Adán, llámese: Señor Jesucristo, entonces viene el
Señor y llega al Huerto de Getsemaní a morir. El Señor muere en un Huerto,
porque el monte Gólgota estaba en un Huerto y después lo entierran en otro
Huerto… Eso quiere decir que el postrer Adán, llámese: Señor Jesucristo murió y
resucitó en un Huerto e inmediatamente después llega al Edén que serían sus
discípulos, ¿Para qué? Para enviarlos a reconquistar el Kosmos, ¿Y por qué digo
eso? Porque cuando el Señor se les presenta a todos sus discípulos resucitado
habiendo vencido a la muerte, a la maldad, a la inequidad y a todos sus
secuaces, les dice, en primer lugar: “Toda
autoridad me ha sido entregada en el
cielo y en la tierra. Por lo tanto id,
pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del
Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.”, ver Mateo 28:18 al 19… y en
segundo lugar les dice: “Id por todo el
mundo. Entre paréntesis, en el original dice Kosmos (G 2889), y predicad el evangelio a toda criatura.”,
ver Marcos 16:15… En otras palabras, Id
por todo el Kosmos (G 2889), enseñando las cosas que Yo les he enseñado y que
guardaron… Eso quiere decir que el plan Dios NO fracasó, porque el Señor Jesucristo
llegó para cumplirlo… y fue por eso que el Señor dijo: “No penséis que he venido para abolir la ley o los profetas; no he
venido para abolir, sino para cumplir.”, ver Mateo 5:17, ¿Por qué? Porque
en Él se tenía que cumplir todo y todo es todo hermano…
Entonces, Dios tenía un plan antes de crear a la nueva humanidad, es
decir a nosotros… y su plan NO falló, el que falló fue el hombre… Esto es
tremendo y es tremendo, porque en el libro de Apocalipsis capítulo 22 aparece nuevamente
el Huerto… El Huerto del Edén desapareció. Usted conoce la historia, pero
permítame recordársela: Cuando el hombre falla Dios lo saca del Huerto, y puso
unos querubines, y una espada encendida,
para que nadie entrara a comerse el fruto del árbol de la vida... El Huerto desapareció y nadie sabía en
dónde se encontraba, pero yo creo, basado en la Biblia, que Dios lo escondió en
el fondo de la tierra, ¿Y por qué digo eso? Porque la historia que aparece en
el libro de Lucas capítulo 16 del rico y
lázaro nos deja ver que el seno de Abraham es = al paraíso y el paraíso es
= al Huerto, pero ese no es el punto, el punto es que Dios escondió el Huerto
para que ningún cuerpo lo encontrara. Entre paréntesis, por eso es que cuando
un cristiano es llamado a la presencia del Señor, su Espíritu regresa al Padre
que lo dio para que lo ponga en la nueva Jerusalén, ver Eclesiastés 12:7… por
otro lado, su alma se va al seno de Abraham según el libro de Lucas capítulo
16:19 al 31, y su cuerpo se queda sepultado en la tumba… Esto es impresionante
y lo impresionante es que Dios escondió el Huerto, pero quedaron sus
vibraciones, por eso es que los hombres de Génesis capítulo 11 comenzaron a
caminar hacia el oriente, ¿Por qué hacia el oriente y no hacia el occidente?
Porque hacia el oriente se encontraba el Huerto del Edén... Esos hombres estaban
buscando el Huerto y estaban caídos... Entonces, viene Nimrod y se lleva a su
gente hacia el oriente. Entre paréntesis, ¿Sabía usted que en el oriente
surgieron las religiones más paganas y que en la actualidad es la parte más
poblada? Pero el punto es que esos hombres comenzaron a buscar el punto
geográfico del Huerto, ¿Para qué? Para instalar su reino y construir una torre…
Algunas versiones dicen: “Vamos,
edifiquémonos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue hasta los cielos...”,
ver Génesis 11:4, pero el original hebreo dice: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre cuya cabeza este en el
Kosmos… En otras palabras, hagamos una antena parabólica para que capte la
señal de la Babilonia espiritual, ver Génesis 11:8 al 9… ¿Y en dónde la instalaron?
En donde ubicó Dios geográficamente el Huerto, ¿Por qué razón? Porque ahí se
encontraban sus vibraciones…
Entonces, viene Dios y esconde el Huerto, y se dice: Voy a tener
contacto nuevamente con los hombres de la tierra, pero de otro lugar geográfico
y lo llamaré: JERUSALÉN… Cuando estudiamos la Palabra nos damos cuenta que en
ese lugar habitaron hombres caídos, es decir gigantes, porque sintieron las
vibraciones del Huerto, ¿Y por qué digo eso? Porque el rey David tuvo que
conquistar Jebús que después vino a ser Jerusalén, es decir la ciudad de David
y la ciudad de nuestro Señor Jesucristo, ver Primera de Crónicas 11:4 al 5…
Esto es impresionante y lo impresionante de esto es que después de que salió el
diablo de la reunión que sostiene con Dios anualmente contaminó a los
habitantes del pueblo de Jerusalén… Ellos se vuelven religiosos y políticos, se
meten con Herodes y Pilatos, y comienzan a enseñar doctrinas de hombres... Por
ejemplo: El divorcio y la deshonra hacia los padres, y cuando viene el Hijo de
Dios lo echan y lo matan. Entre paréntesis, cualquier similitud en la
actualidad es pura coincidencia, pero ese no es el punto, el punto es que el
diablo contaminó a Jerusalén y al contaminarla viene Dios y se dice: Me voy a
seguir comunicando con la humanidad, pero ahora lo voy hacer espiritualmente para
que pocos la encuentren, es decir la habiten, ¿Y por qué digo eso? Porque dice
la Palabra que el Señor Jesucristo se lo dijo a la samaritana y aun a nosotros…
Recuerde, que el Señor le habla a Pedro para que lo entienda Juan y nosotros
somos Juan, entonces nos dice: “…Si tú
conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: “Dame de beber”, tú le
habrías pedido a Él, y Él te hubiera dado agua viva, porque el que beba del agua
que yo le dé de beber, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le daré se
convertirá en él en una fuente de agua que brota para vida eterna… y más
adelante nos dice: La adoración no se encuentra en Samaria ni en Jerusalén y
mucho menos en México sino “la hora
viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en
espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que le
adoren. Dios es espíritu, y los que le adoran deben adorarle en espíritu y en
verdad.”, ver Juan 4:10 al 24, ¿Qué le quiero decir? Que los adoradores no se
encuentran en un lugar en específico, ¿Y por qué digo eso? Porque dice la
Palabra en el libro de Mateo, en el capítulo 18:20 RVR 1960: “…donde están dos o tres congregados en mi
nombre, allí estoy yo en medio de ellos.”. ENTENDIERON. Entonces, si
entendieron, que le dije: Que Dios le quiere colocar el Huerto en su corazón,
¿Y por qué digo eso? Porque el Señor Jesucristo dijo y aun nos sigue diciendo
en el libro de Lucas capítulo 17:20 al 21: “El
reino de Dios no viene con señales visibles, ni dirán: “¡Mirad, aquí está!” o:
“¡Allí está!” Porque he aquí, el reino de Dios entre vosotros está.”…
Hermano Juan Carlos, disculpe, yo creo que usted esta vez SÍ se equivocó,
porque ahí dice: El reino de Dios entre
vosotros está. CIERTO, pero también es cierto que en el original dice: Dentro de vosotros está, es decir en nuestros
corazones…
Esto está tremendo y está tremendo hermano, porque cuando leemos la
Palabra en el libro de Apocalipsis capítulo 22:2 y en el libro de Génesis capítulo
2:9 nos damos cuenta, en primer lugar: que Dios colocó en el centro de esos
Huertos el árbol de la vida… y en
segundo lugar: que Dios hizo que saliera del
Edén un rio para que regara el
Huerto… por otro lado, hizo que saliera un rio de agua de vida, resplandeciente como cristal del trono de Dios.
Eso quiere decir que nosotros podemos homologar el trono con Edén, ¿Qué le
quiero decir? Que cuando uno se sujeta a Dios, el rio de Dios fluye en nuestro
interior… y fue por eso que nuestro Señor Jesucristo dijo y aun nos sigue
diciendo: “El que cree en mí, como ha
dicho la Escritura: De lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva.”,
ver Juan 7:38, pero el punto es lo que nos muestra el Huerto que aparece en el
libro de Apocalipsis capítulo 22:2, ¿Y qué nos muestra? Leámoslo: “En medio de la calle de la ciudad. Y a
cada lado del río estaba el árbol de la vida, que produce doce clases de fruto
dando su fruto cada mes... Entre paréntesis, eso quiere decir que en Enero daba manzanas, y en Febrero daba
naranjas, y en Marzo daba aguacates, y en Abril daba ciruelas, y en Mayo daba
papayas, y en Junio daba mangos... Esto es impresionante, porque
definitivamente el árbol de la vida es nuestro Señor Jesucristo... por eso
consejo: Quiere recuperar el Huerto, quiere habitar el Huerto: No se quede como
un religioso… Lo que estoy tratando de decir es que nacer de nuevo es hermoso,
es glorioso, pero no se puede quedar así, porque si se queda así NO podrá
habitar el Huerto, porque para habitar el Huerto existe un requisito, que se
llama: Dejarse formar, ¿De quién? Del árbol de la vida, llamase: Señor
Jesucristo… y es aquí en donde surge la pregunta de los 20 pesos: ¿Cómo nos va
a formar el Señor? Por medio de los 12 frutos que provienen del Espíritu Santo,
y “El fruto del Espíritu es amor, gozo (Alegría), paz, paciencia, benignidad (Amabilidad), bondad, fidelidad, mansedumbre (Humildad), dominio
propio.”, ver Gálatas 5:22... Recuerde, que los frutos del espíritu son 12 frutos
distintos, que provienen del mismo árbol… Sigamos leyendo: y las hojas del árbol eran para sanidad de las naciones.”… La
segunda parte de este versículo está hablando del final del tiempo… Hermano,
disculpe, si la segunda parte está hablando del final del tiempo quiere decir
que nos vamos a enfermar en el cielo. NO, porque esa parte está hablando de la
semana 70 de Daniel, es decir de la tribulación y de la gran tribulación, ¿Y por
qué dice eso hermano? Porque el apóstol Juan no le está hablando al “…linaje escogido, real sacerdocio, nación
santa, pueblo adquirido para posesión de
Dios.”, ver Primera de Pedro 2:9… Hermano, disculpe, no le entiendo me lo
podría explicar de otra forma. ESTA BIEN; Escuche: Dice la Palabra en el libro
de Génesis capítulo 12:2, que Dios le dijo a Abraham: “Haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu
nombre, y serás bendición… y más adelante le dice: Y en tu simiente serán
bendecidas todas las naciones de la tierra, porque tú has obedecido mi voz.”,
ver Génesis 22:18, ¿Qué le quiero decir? Que Jesucristo es la simiente que venció
a la muerte y a las enfermedades, ¿Y por qué digo eso? Porque el Señor dijo y
aun nos sigue diciendo: “Yo soy la
resurrección y la vida, y la vida carece de enfermedad y de muerte. El que cree en mí vivirá, aunque muera; y
todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. ¿Crees esto?”, ver Juan 11:25 al 26 NVI. ME DI A ENTENDER... Entonces,
si me di a entender, permítame comenzar con esta maravillosa enseñanza del Señor
de señores y Rey de reyes.
Génesis capítulo 2:9 y Apocalipsis capítulo 2:2 es = Al árbol de la
vida… y en medio de esos libros se encuentra el libro de Ezequiel capítulo 47:1
al 7, que dice: “Después me hizo volver
a la entrada del templo; y he aquí, brotaban aguas de debajo del umbral del
templo hacia el oriente, porque la fachada del templo daba hacia el oriente. Y
las aguas descendían de debajo, del lado derecho del templo, al sur del altar. Me
sacó por la puerta del norte y me hizo dar la vuelta por fuera hasta la puerta
exterior, por la puerta que da al oriente. Y he aquí, las aguas fluían del lado
sur. Cuando el hombre salió hacia el oriente con un cordel en la mano, midió
mil codos, y me hizo pasar por las aguas, con el agua hasta los tobillos. Midió
otros mil, y me hizo pasar por las aguas, con el agua hasta las rodillas. De
nuevo midió otros mil y me hizo pasar por las aguas, con el agua hasta la
cintura. Y midió otros mil; y ya era un río que yo no pude vadear, porque las
aguas habían crecido, aguas que tenían que pasarse a nado, un río que no se
podía vadear. Entonces me dijo: ¿Has visto, hijo de hombre? Me llevó y me hizo
volver a la orilla del río. Y cuando volví, he aquí, en la orilla del río había
muchísimos árboles a uno y otro lado… Entre paréntesis, el libro de Génesis
y el libro de Apocalipsis hablan de un árbol
de la vida y el libro de Ezequiel habla de muchísimos árboles de la vida… Ahora, dice la Palabra de Dios que
nosotros somos miembros del cuerpo de Cristo Jesús, ver Primera de Corintios
12:27, es decir que el cuerpo de Cristo es uno, pero nosotros somos sus miembros
en particular, entonces está Cristo y nosotros somos las células, o los
órganos, o los sistemas, por decirlo así, de ese gloriosos cuerpo, llámese:
Jesucristo, ¿Qué le quiero decir? Que si el Señor es el cuerpo, llámese: árbol de la vida, quiere decir que
nosotros somos sus árboles de la vida, ¿Y por qué le digo eso? En primer lugar,
porque el Señor dijo: “Yo soy la luz del
mundo…”, ver Juan 8:12… y después dice: “Ustedes son la luz del mundo…”, ver Mateo 5:14 NVI… y en segundo
lugar, porque el Señor dijo: “Yo soy la
puerta…”, y el salmista nos dice: “Alzad,
oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el
Rey de gloria ¿Y quién es el Rey de gloria? Jehová de los Ejércitos.”, ver Salmos 24:7 RVR 1960… Entonces,
el Señor es la luz y nosotros somos la luz; El Señor es la puerta y nosotros
somos las puertas; El Señor es el árbol y nosotros nos convertimos en sus
árboles… Esto es tremendo, porque escuche lo que dice el versículo 12 de los
árboles, es decir de nosotros: “Junto al
río, en su orilla, a uno y otro lado, crecerán toda clase de árboles que den
fruto para comer. Sus hojas no se marchitarán, ni faltará su fruto. Cada mes
darán fruto porque sus aguas fluyen del santuario; su fruto será para comer y
sus hojas para sanar.”, ¿Qué le quiero decir? Que si usted se injerta al árbol de la vida, llámese: Señor
Jesucristo tendrá una casa unida al propósito de Dios… por eso consejo: Padres
nos tenemos que enamorar del Señor, porque si nosotros nos enamoramos del Señor
nuestros hijos se enamorarán de Él ¿Y por qué digo eso? Porque dice la Palabra
en el libro del Cantar de los Cantares capítulo 1:4 RVR 1960: “Atráeme; en pos de ti correremos…”…
por eso abramos nuestras Biblias en el libro de Proverbios, en el capítulo 3:13
y 18, para que el Señor de señores nos muestre por su bendita misericordia los
beneficios que trae el árbol de la vida…
“Bienaventurado el
hombre que halla sabiduría y el hombre que adquiere entendimiento, porque Es árbol de vida para los que de ella echan
mano, y felices son los que la abrazan.”
Lo que nos está diciendo el proverbista, es: Quieren ser el instrumento
que lleve la vida, es decir la comprensión, la reconciliación, el juicio, el
discernimiento, la felicidad, la alegría, el gozo, es decir LA ARMONÍA, a la
casa, y a la Iglesia, y al trabajo o a la escuela... ¡Quieren! Tienen que
conseguir sabiduría, porque la sabiduría es
el árbol de vida para las que de ella echan manos, pero ¿Qué clase de
sabiduría? La que no viene de lo alto, es decir la que es terrenal, animal, diabólica, es
decir la que se basa en los celos y en
la ambición personal, llámese: Rivalidad,
ver Santiago 3:15 al 16… por eso consejo: Busquemos con ahínco la sabiduría que proviene de lo alto, y que es: “…primeramente
pura, después pacífica, amable, condescendiente, llena de misericordia y de
buenos frutos, sin vacilación, sin hipocresía.”, ver Santiago 3:17, para
que podamos ser el instrumento que lleve vida, Amén.
Ahora, miremos Proverbios capítulo 11:30.
“El fruto del justo
es árbol de vida, y el que gana almas es sabio.”
Lo que nos está diciendo el proverbista, es: Tienen que ser justos, pero
para eso los tienen que FORMAR, porque la formación los transformará en un árbol de vida, TLA... por eso yo
Juan Carlos Bonilla Guerrero no puedo concebir que un cristiano NO de fruto…
por otro lado, a los recién plantados, humildemente les digo: Tienen que dar
fruto… Necesitamos, que los que hayan sido justificados por Cristo y que son
llamados justos a partir de la justificación que tuvieron de la Fe, DEN FRUTOS,
¿Y qué tipo de frutos? Los de la carne o los del Espíritu; Los del Espíritu,
porque los frutos del Espíritu dan vida, y eso amado hermano es árbol
de vida.
Ahora, miremos Proverbios capítulo 13:12.
“La esperanza que se
demora enferma el corazón, pero el deseo cumplido es árbol de vida.”
¿Y qué es el deseo cumplido? Es más o menos lo que dijo el apóstol Juan,
¿Y qué dijo? Dijo: “Amado, yo deseo que
tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu
alma.”, ver Tercera de Juan 1:1 RVR 1960… por eso me pregunto y le
pregunto: ¿Queremos que la bendición del apóstol Juan llegue a nuestra vida?
Demos los 12 frutos del Espíritu Santo, y “El
fruto del Espíritu es amor, gozo (Alegría), paz, paciencia, benignidad (Amabilidad), bondad, fidelidad, mansedumbre (Humildad), dominio propio.”, ver
Gálatas 5:22... ME DI A ENTENDER. Entonces, si me di a entender, ¿Qué dije?
Dije: Se tiene que dejar formar, porque la formación lo hará dar fruto, y eso es árbol de vida, Amén.
Ahora, miremos Proverbios capítulo 15:4.
“La lengua apacible
es árbol de vida, más la perversidad en ella quebranta el espíritu.”
¿Qué es apacible? Es ser pacifico, ¿Y qué virtud tiene el pacifico? La
paz… y paz no es un sentimiento de tranquilidad, paz es que todo esté en orden
conforme a la voluntad de Dios… Lo que estoy tratando de decir es que la paz de
Dios no es la paz que nos da el mundo, y que es superficial y pasajera, es
decir por medio de pastillas, o de rejas, o de guaruras… por eso consejo:
Busquemos con empeño y eficacia la paz de Dios, porque su paz es árbol de vida.
Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo,
que la persona que se congregue va a reconocer la autoridad y la autoridad lo
va a formar, y la formación va a hacer
que fluya el rio de la vida que alimentará su árbol de vida, ¿Y por qué digo eso? En primer lugar, porque el agua
que alimentaba el árbol de la vida que se encontraba en el libro de Apocalipsis
capítulo 2:2, salía del trono y en el trono se sienta el Rey, y Rey significa:
Autoridad… y en segundo lugar, porque el agua que alimentaba a los árboles que
se encontraban en el libro de Ezequiel capítulo 47:7 salía debajo del umbral
del templo; El templo es figura de la casa de Dios y en la casa de Dios uno se
congrega, es decir se forma, es decir se capacita, ¿Para qué? Por un lado, para
dar frutos dignos de arrepentimiento… y por otro lado, para ayudar a la
edificación del cuerpo de Cristo Jesús… Entonces, búsqueda es = a árbol de vida
y árbol de vida es = a Huerto y Huerto es = recuperar y recuperar es = a
dejarse formar... ¿Qué le quiero decir? Que si usted quiere ser un árbol de vida tiene que buscar al árbol de vida, llámese: Jesús, para
que lo FORME… Lo que estoy tratando de decir es que el cristiano se tiene que convertir
en un árbol de vida, para emular todo
lo que Jesús hace, hizo y fue, ¿Y por qué digo eso? Porque Jesús dijo: “Mientras estoy en el mundo, yo soy la luz
del mundo.”, ver Juan 9:5, pero cuando Él se va dice: “Vosotros soy la luz de este mundo.”, ver Mateo 5:14… Eso quiere
decir que nosotros nos tenemos que convertir en luz también, pero NO nos
podemos convertir en luz si antes NO somos iluminados por Él.
22 de Diciembre de 2018
Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo
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