NO TE CONDENES MAS

 

LA BIBLIA NOS HABLA:

“En Él, ¿En quién? En el Señor Jesucristo, tenemos redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de su gracia (Efesios 1:7) LBLA.

En este día quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Rey de reyes con un ejemplo, que quizás alguna persona podría estar viviendo en estos momentos:

Digamos que esa persona tuvo siete abortos,

Se siente culpable, se siente condenada y no se puede perdonar...

Yo creo que nadie, pero nadie, podría tener la esperanza, ¡La Fe! Si no fuera por la gracia de Dios; Nosotros... Si, usted y yo amado, podemos obtener el perdón y la redención de nuestros pecados mediante la gracia de Dios... Y esto no lo digo yo: Juan Carlos Bonilla Guerrero, lo dijo un hombre que se dedicaba a la trata de personas... Lo dijo un hombre que se dedicaba a vender y al comercio de personas, según él, que no tenían almas... Lo dijo el capitán de un barco inglés, que llevó a más de 10,000 personas hacia distintos lugares a la esclavitud, más las que echó a la mar por la borda de su barco, ya sea por enfermedad o porque se murieron.

Dice la historia que John Newton fue hijo de una mujer piadosa y que su madre le inculcó hasta los 7 años de edad principios cristianos, porque ella se murió de tuberculosis...

John Newton, creció y al crecer se enroló en un barco negrero que lo llevó a la costa de Sierra Leona, allí se convirtió en el representante de un comerciante de esclavos destacándose por su crueldad y vileza, pero un día, tal como le sucedió al hijo pródigo, pero en otro escenario; Volvió en SI, ¿Cuándo? “Cuando la tormenta de una noche oscura golpeaba fuertemente su embarcación; Se aterrorizó e imploró la ayuda de Dios”; Se convirtió y a pesar de que Dios lo perdonó, lo rescató, lo preservó y lo restauró de llevar una vida turbulenta... De ser un hombre rebelde, libertino, cruel y despreciable, no podía conciliar el sueño; No podía descansar ni dormir en las noches, porque las más de 10,000 almas que vendió, que mató, lo perseguían...

John Newton se sentía culpable; Se sentía condenado y no se podía perdonar hasta que un día buscó la forma de pagar su penitencia, según él, para estar en paz con Dios... Y dice la historia que buscó una Iglesia para llevar el mensaje de salvación y que en la Iglesia él hacía de todo; No había subsidio... Él predicaba, él aconsejaba, él discipulaba, él dirigía la alabanza, él oraba y además realizaba todos los quehaceres de la Iglesia: Lavaba, tendía, planchaba, regaba, barría, trapeaba y limpiaba, y limpiaba hasta las letrinas; También estacionaba a los caballos y recibía a todas las personas en la entrada de la Iglesia con los pies descalzo, como pagando una penitencia por lo que según él había hecho en el pasado, olvidándose, que Jesús... Sí, que Cristo, ya pagó por él y por usted y por mí lo que hicimos, y lo que seguiremos haciendo, ¿En dónde? En la cruz del Calvario, ver Efesios 1:7 y Colosenses 1:13 al 14...

Por eso es que dice la Palabra de Dios en la Primera carta de san Juan:

Hijitos míos, os escribo estas cosas para que no pequéis. Y si alguno peca, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo, ver Primera de Juan 2:1, Amén...

Entonces, John Newton se sentía salvo, pero culpable... Predicaba, alababa, oraba y hacía todos los quehaceres de la Iglesia como una penitencia; Hasta que un día, encontró la verdad en la gracia de Dios y agarró la música que los esclavos cantaban tristemente cuando iban en el barco camino hacia su muerte para ponerle la preciosa letra que lo rescató, que lo restauró, que lo salvó, es decir: Que le quitó la culpa que lo juzgaba y lo condenaba, y dice:

Sublime Gracia del Señor, cuan dulce el sonido.

Que salvó a un pecador como yo,

…Así dice la traducción al español, pero literalmente, dice:

Sublime Gracia, Maravillosa Gracia, Sorprendente Gracia.

Que salvó a un desgraciado (A un vil), como yo.

Estaba perdido, pero fui encontrado.

Estuve ciego, pero ahora veo.

John Newton se sentía culpable en su corazón. Entre paréntesis, ¿Cuántos somos cristianos? Entonces si nosotros somos cristianos... Escuche con mucha atención: Si por la casualidad de la casualidad tropezamos o cometemos algún error, sea cual sea: No nos tenemos que sentirnos acusados ni condenados... Recuerde, que eso es lo que quiere que pensemos el acusador, el engañador y mentiroso, llámese: Diablo o satanás, y que el Señor lo reprenda... por eso consejo: Si por la casualidad de la casualidad te sientes acusado y condenado... Recuerda, lo que dice el libro de Romanos, en el capítulo 8:32 al 35: “¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condena? Cristo Jesús es el que murió, Sí, más aún, el que resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. ¿Quién nos separará del amor de Cristo Jesús?, ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?”. Entendieron... Entonces, si entendieron, ¿Qué dije? Dije: Así nos dice el Señor: Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad... En otras palabras, Yo, el gran Yo Soy, no te voy a perdonar a ti por lo que hiciste, hagas o harás, sino porque Mi Gracia habita y fluye en ti...

¿Y qué es la gracia?... La gracia de Dios.

Hermano Juan Carlos, disculpe, la palabra gracia proviene de la palabra griega Charis (G 5485), que significa: Favor inmerecido, regalo inmerecido, bondad y buena voluntad; Cierto... Pero, ¿Qué representan esos atributos en nosotros? El favor del Señor en nuestro corazón... En otras palabras, Dios instaló su gracia en nuestro corazón para que influencie en nosotros... Pero, ¿Para qué nos la instaló? Para que venzamos el pecado... En otras palabras, para que NO fallemos y SI fallamos... Escuche: No nos tenemos que sentir acusados ni condenados, pues: “...Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.”, ver Primera de Juan 2:1... Pero eso hermano, NO nos da la libertad para que juguemos con Su Gracia... Recuerde, que existen tres tipos de personas: Los salvos, los perdidos y los optativos, y los optativos se pueden perder, ver Juan 17:10 al 20, ¿Por qué? Porque pueden apostatar y la apostasía según la Biblia puede ser reversible o irreversible... Ejemplo Bíblico de apostasía irreversible: Judas Iscariote... Ejemplo Bíblico de apostasía reversible: Pedro, el apóstol, ver Mateo 26:34 al 75, pero ese no es el punto, el punto es que John Newton no se podía perdonar por lo que había hecho en el pasado, hasta que un día, hasta que un día, lo alumbro la gracia de Dios... La gracia que ilumina en medio de la oscuridad, es decir: Cristo, porque en Cristo hay victoria; Lo que hizo nuestro Señor Jesucristo por nosotros en la cruz del Calvario; El derramamiento de Su sangre; Su preciosa sangre, nos dio la victoria y la victoria sobre cualquier desierto o aguas que estemos atravesando... Hermano, Hermana, en el nombre de Cristo hay victoria y recuerde que NO es con fuerza ni poder y mucho menos por vista, sino que es con su Santo Espíritu y con Fe; La Fe que depositamos sobre la hermosa y preciosa Gracia de Dios, Amén.

Y Él me ha dicho: Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, muy gustosamente me gloriaré más bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en mí, ver Segunda de Corintios 12:9... 

El Señor nuestro Dios, es un Rey de reyes tierno, compasivo y clemente, lento para la ira, Y abundante en misericordia, ver Joel 2:13… por eso consejo: Confesémosle al Señor todas nuestras transgresiones, porque Él muy gustosamente perdonará nuestros pecados y maldad, ver Salmos 32:5... Y recuerde, que el que encubre sus pecados no prosperará; Más el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia, ver Proverbios 28:13 RVR 1960, pero ese no es el punto, aunque no lo podemos obviar, el punto es que cuando nosotros cometamos más de algún error no nos tenemos que sentir perseguidos, ni juzgados, ni condenados, ya que el Señor nos dice: Bástate mi gracia; Porque mi poder se perfecciona en la debilidad, RVR 1960... Nosotros NO podemos negar que hay momentos en donde nuestras debilidades nos quieren llevar al fracaso, ya sea espiritual o secular… por eso me pregunto y le pregunto: ¿Nos hemos sentido débiles alguna vez? A lo mejor usted y yo no somos débiles en las mismas cosas, quizás para mí su debilidad me cause risa y para usted mi debilidad le sea insignificante, pero lo que NO podemos negar es que todos tenemos debilidades… Y es aquí en donde surgen las famosas preguntas de los 20 pesos: ¿Qué estamos haciendo en medio de nuestras debilidades?: ¿Nos estamos dejando llevar por ellas?, ¿Nos están causando problemas?, ¿Nos están llevando al fracaso? Estas preguntas nos las tenemos que contestar, por eso permítame decirle, que SI nosotros nos hemos sentido débiles o alejados de Dios, o que SI ya NO nos podemos levantar y seguir adelante, ya sea en nuestra vida espiritual o secular… Consejo: Así nos dice Dios: Bástate mi gracia; Porque mi poder se perfecciona en la debilidad… En otras palabras, les envío mi gracia, porque mi gracia es la única llave que les ayudará a matar al que lo está matando… En otras palabras, mi gracia los ayudará a seguir adelante; Mi gracia los impulsará; Mi gracia los fortalecerá; Mi gracia les ayudará a recordar que son cristianos e hijos del Dios altísimo… por eso permítame decirle, que SI por la casualidad de la casualidad usted es de las personas que se siente acusada y condenada por el enemigo o sus secuaces... Dice la Palabra en el libro de Romanos capítulo 8:1: “No hay ahora condenación para los que están en Cristo, los que NO andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.”… Por eso consejo: No le permitamos al enemigo y a todos sus secuaces que nos acusen ni nos condenen, aunque hayamos tropezado o cometido más de algún error, ¿Y por qué digo eso? Porque dice la Palabra en el libro de Apocalipsis capítulo 12:10 RVA 1602: El poder de su Cristo, se está manifestando en nosotros en estos tiempos de confrontación espiritual y que son finales, para que podamos vencer al acusador, llámese: Serpiente antigua, diablo o satanás... Por eso consejo: Despojémonos de la acusación, porque la acusación nos podría llevar a la condenación y la condenación nos podría llevar a la separación del amor de Cristo y la separación del amor de Cristo Jesús nos podría llevar a la destrucción de nuestro cuerpo y alma, ver Romanos 8:33 al 35, por eso, Así nos dice el Señor: “Bástate mi gracia...”, porque Mi gracia está en tu sangre; En tu vida... Porque Mi gracia es una de las llaves que los ayudará en cada momento de su existir, Amén...

La gracia de Dios nos da esperanza, y esperanza contra esperanza    ¿Qué le quiero decir?

Que el Señor nuestro Dios, usó Su gracia en el pasado y usa Su gracia en el presente, Y la seguirá usando en el futuro, por eso tenemos que tener presente, que SI hemos cometido algún error en nuestra vida, ya sea en el presente o en el pasado, No nos tenemos que sentir acusados ni condenados, porque cuando llegamos a Cristo y nos arrepentimos, Dios, nuestro Señor, Nos perdona... Y recuerde, que Dios sepulta nuestras maldades e iniquidades. Y arroja todos nuestros pecados a las profundidades del mar, ver Miqueas 7:19 DHH, por eso tenemos que tener bien presente, que los errores que cometimos en el pasado o que cometamos en el presente no van a impedir que Dios cumpla todos sus propósitos en nuestra vida... Y recuerde, que Dios es un Dios de orden,

Pero también es un Dios: Misericordioso y clemente;

Lento para la ira, y grande en misericordia, ver Salmos 103:8 RVR 1960...

                                                                                        ¿Qué le quiero decir amado hermano?

Que los sacrificios que quiere Dios son el espíritu quebrantado, Y que al corazón contrito y humillado no desprecia Dios, ver Salmos 51:17 RVR 1960...

Gloria a Dios, Aleluya y Amén...

Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que nosotros NO nos tenemos que sentir acusados ni condenados por lo que hagamos o hayamos hecho...

Nosotros somos libres y somos libres, porque nuestras culpas y maldades fueron borradas en la cruz del Calvario... Nosotros somos libres, porque fuimos perdonados por el amor de Dios... Ahora, ya No hay más condenación para los que están en Cristo Jesús, ver Romanos 8:1: Cristo nos libertó... Cristo derribó nuestras murallas y nos quitó las cadenas; Dios las destruyó y por eso somos libres, pero esa libertad no nos tiene que permitir jugar con la gracia de Dios.

En la presencia de Dios encontramos libertad y sanidad... Consejo: Busquémosla...

...Creamos en Él; Creamos en Su Palabra y creamos en todas y todas Sus Promesas...

Los tiempos que estamos viviendo amado, yo creo, que son difíciles y finales... Yo creo, que la Parusía de nuestro Señor está a la vuelta de la esquina, ¿Y por qué digo eso? Porque está profetizado en Su Palabra... En los últimos tiempos aumentará la iniquidad y el amor de muchos se enfriará, ver Mateo 24:12... En los últimos tiempos algunos apostataran de la Fe, ver Primera de Timoteo 4:1... En los últimos tiempos derramaré sobre todo mi pueblo un espíritu de gracia y de súplica, ver Zacarías 12:10... En los últimos días, derramaré de mi espíritu sobre toda carne, nos dice Dios, ver Hechos 2:17, y después nos dice:

Vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán,

Vuestros ancianos soñarán sueños,

Vuestros jóvenes verán visiones, ¿Y eso es lo que está sucediendo, o No?, ver Joel 2:28...

Como usted escuchó, lo que yo dije es porque lo dice la Biblia, pero también nos dice: Dios nos está dando en estos tiempos Su gracia, en primer lugar, para que podamos ser parte de la novia y esposa de Cristo Jesús, es decir: Para apartarnos de Su ira; De sus copas... Y en segundo lugar, nos está derramando Su gracia para que cuando tropecemos o cometamos más de algún error NO nos sintamos acusados ni condenados, y SI por la casualidad de las casualidades amado hermano, usted se encuentra en ese punto... Recuerde:

Bástate mi gracia; Porque mi poder se perfecciona en la debilidad... Y si alguno peca, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo, Amén...

...Quizás la culpa que sientes tú, No sea por los siete abortos, pero te quiero decir algo: Si has cometido algún error, sea cual sea... Yo No te voy a felicitar por lo que hiciste, pero te puedo decir en el nombre de Jesús; En el nombre del que murió por tus pecados y por mis pecados, Y que NO solo alcanza para los nuestros por su sangre, sino para toda la humanidad: Que NO te tienes que sentir acusado ni condenado, porque todos tus pecados ya fueron perdonados...

Cuando nosotros nos presentamos al trono de la gracia a confesar y a apartarnos de nuestros pecados, Dios nos perdona y echa cada pecado a las profundidades del mar, ¿Por qué? Porque el Señor nuestro Dios, No desprecia al corazón contrito y humillado... por eso consejo: Si tienes algún pecado, que no puedes olvidar, que te está martillando la mente día y noche; Que te está acusando y condenado, confiésalo y NO a mí, sino al Señor... Hoy, es el momento y SI lo haces te puedo asegurar, que la gracia de Dios hará que LO OLVIDES de tu mente... y SI ya eras cristiano cuando lo cometiste... Recuerda, lo que dice la Biblia y no yo: Hijitos míos, os escribo estas cosas para que no pequéis. Y si alguno peca, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo, ver Primera de Juan 2:1, Amén... 

Es muy importante, que en esta época que estamos viviendo, donde la cercanía del Señor es más y más evidente, te despojes de cualquier acusación que te esté condenando... Y yo SÉ, y no porque sea hijo de un profeta, que mucha gente se encuentra en esta condición o similar a esta, por eso: No te acuses ni te condenes; Despójate y Olvida…

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