FAMILIA, SUMERJÁMONOS EN LOS RÍOS DE DIOS…
LA
BIBLIA NOS HABLA:
“El que cree en Mí ¿En quién? En nuestro
Señor Jesucristo, como ha dicho la
Escritura: De lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva.” (Juan
7:38)
En este día quisiera
comenzar esta maravillosa enseñanza del Señor dándole gracias a Dios: “Abba Padre...”; Gracias, gracias, por
permitirle hoy a Tu Santo Espíritu reunirnos en Tu casa a escuchar Tu bendita
Palabra y a aprender un poquitito más acerca de Ti...
A aprender de lo que
Tú Padre, deseas, anhelas y quieres para nuestra vida y para la vida de cada
miembro de nuestra amada y bendita familia… por eso me pregunto y le pregunto:
¿Será importante para
el Señor nuestro Dios la familia?... y, ¿Para nosotros padres
e hijos?... Primero Dios que SÍ.
Nosotros, padres e hijos,
estamos viviendo tiempos difíciles y finales, por eso le tenemos que prestar
mucha mayor atención a los temas familiares, aunque nos resulten incomodos, porque
el enemigo, llámese: Serpiente antigua, diablo o satanás desea y quiere
destruir a las familias, ¿Cómo? Utilizando a ciertos grupos de personas... Por
ejemplo: A los homosexuales...
El enemigo está utilizando, desafortunadamente, a los homosexuales, ¿Para
qué? Pregunto... Para destruir al matrimonio, porque la palabra matrimonio proviene
de la raíz Matriz, de la que también procede madre y maternidad... Y si dos
hombres se quieren casar... Me pregunto y le pregunto: ¿Pueden vivir y
disfrutar de la maternidad? Claro que NO, ¿Por qué razón? Porque NO tienen
Matriz. Entre paréntesis, yo Juan Carlos Bonilla Guerrero no estoy atacando, ni
juzgando, ni condenado a los homosexuales… Yo los amo y los respeto en el
Señor, pero eso NO quiere decir que yo Juan Carlos Bonilla Guerrero, temeroso y
siervo del Señor, no pueda decir lo siguiente: Los homosexuales que se logran
casar ni siquiera podrían decir: Somos un matrimonio, aunque según ellos tienen
sus argumentos (Los derechos humanos y la ideología de género), y que no son
válidas por Dios ni por la misma naturaleza... pues escrito esta: “Y respondiendo Jesús, dijo: No habéis
leído que aquel que los creó (Jehová),
desde el principio los hizo varón y hembra.”, ver Mateo 19:4… En otras
palabras, escrito esta: No sabéis,
que las personas del mismo sexo no se pueden fecundar, ni engendrar, ni
procrear, porque Él que los creó, desde
el principio los hizo varón y hembra, por eso “...El hombre dejara a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y
los dos serán una sola carne.”, ver Mateo 19:5 y Génesis 2.24 RVR 1960. Ah…
Y en donde dejamos a las feministas, que están exigiendo la despenalización del
aborto, porque ellos (Los de la industria del aborto), necesitan a los fetos,
lamentablemente, de 14 a 20 semanas y de 20 a 22 semanas, ¿Para qué? Para
sacarles las células madres, porque las necesitan para el tratamiento de
diferentes enfermedades, como ser: El cáncer, los trastornos de la sangre y el desorden
inmunológico...
Dios desea y anhela con todo su corazón, que nosotros familia, volvamos
al principio...
Dios desea y anhela
con todo su corazón, padres, que reconquistemos el paraíso para que entremos con
cada miembro de nuestra amada y bendita familia a él, y con Él, Amén. Padres... Escuchen
con mucha mayor atención: SI nosotros logramos entrar a la tierra de los
vivientes ya NO necesitamos hacer tantas cosas dentro de la casa para que
nuestros hijos caminen sobre el camino,
la verdad y la vida… Hermano Juan Carlos, disculpe, ¿Qué tengo que hacer
para entrar a la tierra de los vivientes, es decir: Al paraíso?: Visitar e integrarse a la Iglesia, porque en la Iglesia se encuentra el
paraíso y SI descubre el paraíso... Escuche: Nunca se va a querer ir de ahí.
La Iglesia, es = al paraíso... Por otro lado, la célula que conforma el
hogar es el matrimonio y la célula que conforma a la sociedad es la Iglesia…Lo
que estoy tratando de decir es que el matrimonio es la base de la familia y la
familia tiene que ser ministrada por medio del Señor nuestro Dios, porque la familia tiene que ser la base de la
Iglesia y la Iglesia tiene que ser la base de la sociedad... SI no hay una
Iglesia fuerte con matrimonios fuertes difícilmente va a haber un impacto
poderoso y positivo en la sociedad... Y es por eso que dice la Palabra en el
libro de los Salmos, en el capítulo 127:1:
“Si el Señor no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican; Si el
Señor no guarda la ciudad, en vano vela la guardia.”... En otras palabras,
lo que nos está diciendo el salmista, es: Cónyuges; Padres, SI el Señor no
ministra su casa... Si el Señor no edifica su casa de nada sirve que se esfuercen...
Hermano Juan Carlos, disculpe, ¿Qué nos está diciendo?... Escuche: Tenemos que
convencer al Señor nuestro Dios para
que Él edifique nuestra casa, porque si nosotros, padres, edificamos nuestra
casa con nuestros hijos, es decir: Con nuestros propios medios, pero sin
convencer al Señor nuestro Dios, en
vano estamos trabajando. Entendieron... Entonces, si entendieron, ¿Qué dije?
Dije: Padres, tenemos que convencer al Señor
nuestro Dios para que Él edifique nuestra casa por medio de nuestras
acciones, anhelos y oraciones... cuando eso sucede a nivel matrimonial, es
decir: Familiar, la sociedad cambia y al cambiar la sociedad el Señor nuestro Dios guarda la ciudad
sin tanto problema, es decir: Ya no habrá mucha delincuencia, como ser: Asesinatos,
violaciones, secuestros, robos, corrupción e impunidad... Lo lamentable de esto
es que la sociedad cree que al aumentar el número de policías se van a
solventar todos los problemas que envuelven a nuestra sociedad y cuando digo
nuestra sociedad, me refiero: A los políticos y a los no políticos; A los
pecadores y a los impíos; A los religiosos y a los cristianos… por eso consejo:
¿Queremos que Dios guarde nuestra casa, y nuestra ciudad, y nuestro país?
Pidámosle con rogativas y acción de gracias que edifique nuestra casa, porque
si Él edifica nuestra casa, nuestro hogar caminará bajo la perfección... Lo que
estoy tratando de decir es que nosotros los cristianos tenemos que caminar bajo
la perfección del Señor nuestro Dios,
porque SI nosotros caminamos bajo la perfección del Señor nuestro Dios la sociedad caminará también bajo la perfección
de Dios y si la sociedad camina bajo la perfección de Dios, el Señor nuestro Dios guardará nuestra
casa, y nuestra ciudad, y nuestro país, ¿Y por qué digo eso? Porque dice la
Palabra en el libro de Segunda de Crónicas, en el capítulo 7:14: “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual
mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus
malos caminos; Entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y
sanaré su tierra.”, Amén...
¿Cuántos lo creemos?, Entonces, ¿Qué
tenemos que hacer? Humillarnos y orar. Ah... Y buscar el rostro del Señor, y convertirnos
de nuestros malos caminos, pero
ese no es el punto, aunque es hermoso, el punto es que los matrimonios tenemos
que edificar conjuntamente nuestra casa con Cristo... Todos los miembros de
la familia de Dios tenemos que afectar a la Iglesia para que la Iglesia afecte
a la sociedad... y para eso necesitamos, padres e hijos, es decir: Familia... y
familias de Dios, sumergirnos en sus ríos, es decir: En los ríos de Dios...
La Biblia nos muestra por lo menos tres lugares en donde se manifiestan
los ríos de Dios.
1.- NÚMERO UNO: En el
Huerto del Edén... Pero,
¿Para qué los creó el
Señor nuestro Dios?, ver Génesis 2:10 al 14.
Dice la Palabra que el Señor Dios tomó a Adán y lo puso en el huerto del Edén, para que
lo cultivara y lo cuidara, ¿Y lo cuidara de qué? De los que habla el libro
de Génesis capítulo 4 y capítulo 6, es decir: De los errantes (Tierra de Nod),
de los gigantes y de los valientes (Hijos de los hijos de Dios con las hijos de
los hombres), pero ese no es el punto, el punto es que el Señor colocó a Adán en el huerto del Edén y dentro del huerto colocó cuatro ríos, ¿Para
qué? Para que las familias sean bendecidas por medio de ellos... Por ejemplo: El primero: El Pisón, y el Pisón
es el rio de la expansión y de la prosperidad, porque provee oro del bueno... El segundo: El Gihón, y el Gihón es el rio del crecimiento y del desarrollo... El tercero: El Tigris, y el Tigris es el rio de la revelación, es
decir: De las visiones y de los sueños hechos realidad... El cuarto: El Eufrates, y la palabra Eufrates proviene de la palabra griega Phrat y Phrat, significa:
Fertilización o fructífero... En otras palabras, frutos y el fruto del Espíritu
es el amor, ver Gálatas 5:22 al 23… El
Señor nuestro Dios, desea y anhela con todo su corazón instalar en nuestro
hogar su Edén (H 5730), ¿Para qué? Para que haya placer y deleite, es decir:
Para que tengamos alegría, gozo y felicidad, es decir: Satisfacción...
2.- NÚMERO DOS: Debajo
del umbral del templo de Dios... Pero,
¿Para qué creó el
Señor nuestro Dios ese rio?, ver Ezequiel 47:1 al 5.
Para que nosotros los
padres y cada miembro de nuestra amada familia subamos de nivel, tal cual como
lo hizo Ezequiel... Midamos quinientos metros, ¿Dónde le llega el agua? Hasta los tobillos y los tobillos
significan: Limpieza... Padres; Hijos, necesitamos limpiarnos los pies para
caminar en el evangelio, para seguir avanzado, porque si seguimos en pecado,
pregunto: ¿Avanzamos o nos estancamos?... por eso consejo: Digámosle al Señor:
Señor límpiame, porque necesito que el agua me llegue hasta las rodillas y las
rodillas, significan: Rendición, oración y adoración... Ahora, midamos
quinientos metros más, ¿Dónde le llega el agua? Hasta la cintura y la
cintura, llámese: Preocuparnos por nuestra simiente y generación,
significa: Interceder y la intercesión... Escuche: La intercesión lo catapultará
a la inmersión...
Padres; Hijos,
necesitan sumergirse en el rio de Dios...
Padres, Hijos,
necesitan ser bautizados por el Espíritu Santo... porque, el espíritu Santo limpia
y purifica, es decir: Guía, direcciona e ilumina el alma para que el alma quede
saciada, Amén.
Dios desea, que todos
los hogares sean renovados... Dios desea, que todos
los hogares sean fortalecidos... Pero, Qué se necesita para
eso? Evolucionar, tal cual como evolucionó Ezequiel...
Dios desea bautizarlo
con el Espíritu Santo... Dios desea y anhela con todo su corazón ungirlo con su
Espíritu Santo, porque el Espíritu Santo lo conducirá al diseño que Dios estableció
para nuestra vida y para la vida de cada miembro de nuestra amada y bendita
familia, Amén...
3.- NÚMERO TRES: En nuestro
interior...
Hermano Juan Carlos,
disculpe, ¿Será posible, qué en nuestro interior corran ríos?
Dice la Palabra: “...El que cree en mí, como dice la
Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.”, ver Juan capitulo
7:38, pero también dice: “¿No sabéis que
sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?”, ver
Primera de Corintios 3:16... Nosotros somos templo y morada del Espíritu Santo,
y si nosotros somos templo y morada del Espíritu Santo quiere decir que en
nuestro interior corren ríos de agua
viva y que los ríos de agua viva,
llámense: Espíritu Santo, nos harán evolucionar, es decir: Crecer y
desarrollarnos (Espiritualmente hablando), como lo que somos, ¿Y qué somos? Una
familia de Dios, Amén.
Los ríos de Dios nos
van a dar el conocimiento y la revelación para entender el evangelio e ir en
pos de todo y todo es todo lo que nos ordena el Señor nuestro Dios, que debemos hacer los cónyuges y los hijos
dentro y fuera de nuestros hogares... Por ejemplo:
“...Mujeres; Esposas, estad sujetas a vuestros maridos...” (Primera de Pedro 3:1)
¿Y qué significa:
Sumisión?, Según el diccionario
es sinónimo de obediencia y respeto... Pero, Según el griego
(Hypotassó (G 5293)), significa: Poner bajo, estar sujeto a, someterse, ceder a
la amonestación o consejo, subordinar reflexivamente para obedecer: Estar bajo
obediencia.
En otras palabras, la
sumisión significa: Estar bajo la cobertura de... Estar bajo la sombra de... Y
dice la Palabra de Dios en el libro del Cantar de los Cantares, en el capítulo
2:3 RVR 1960:
“...Como
el manzano entre los árboles del bosque, así es mi amado entre los jóvenes. A
su sombra placentera me he sentado, y su fruto es dulce a mi paladar.”
Según el Salmos capítulo
1:3: Todos los hombres seremos como
árboles plantados junto a corrientes de agua; Y los arboles dan sombra y fruto... por eso me pregunto y
le pregunto:
Esposos, ¿Queremos
que nuestras esposas se sujeten?... Entonces,
¿Qué tenemos que
hacer? Dar una buena sombra... Y,
La sombra tiene que
ser agradable y placentera como la del manzano...
Recordemos esposos,
que nuestras esposas van a estar debajo de nuestra sombra... por eso consejo:
Esposos, averigüemos que tipo de árbol somos, porque dependiendo del árbol que
seamos esa es la sombra que damos en nuestro hogar dulce hogar... Por ejemplo:
El rey Saúl se
sentaba debajo de un tamarisco, ver
Primera de Samuel 22:6... y el tamarindo significa: Amargura... Es fácil decir:
Estad sujeta, pero si la sombra es
de un tamarisco, de un amargado, pregunto: Esposos: ¿Cómo va a vivir nuestra
esposa? Súper amargada...
¿Y nuestros hijos? Se
ha... O nos hemos preguntado...
Dice la Palabra que el Señor Dios dispuso que una planta creciera
sobre Jonás para que hiciera sombra sobre su cabeza y lo librara de su
incomodidad… pero también dice: Que
al rayar el alba del día siguiente le envió un gusano a atacar la
planta, y esta se secó... Jonás se molestó con el Señor, y dijo: Mejor me es la muerte que la vida, ver
Jonás 4:5 al 8, pero lo interesante de esto es que la palabra planta proviene de la palabra hebrea Qiyqayown
(H 7021), y Qiyqayown, significa: Calabaza o planta de ricino y el ricino
provoca náuseas... En otras palabras, intoxica y SI intoxica, ¿Qué produce? Alergia
y vómito... por eso me pregunto y le pregunto: ¿Cómo era el hogar de Jonás? Y
si nosotros esposos, somos tóxicos, pregunto:
¿Cómo vivirán nuestras
esposas y nuestros hijos?, ¿Se sujetará nuestra
esposa?
Ni en broma...
El Señor nuestro Dios desea y anhela con
todo su corazón que las esposas se sujeten a sus maridos, pero la sujeción NO se
exige, se gana, ¿Y cómo se gana? Brindándole Amor y Amor, significa: Amarla,
estimarla, respetarla, cuidarla, protegerla y proveerla... por eso consejo:
Esposos, ¿Queremos que nuestras esposas se sujeten? Derramemos Amor... Claro,
que la sujeción tiene límites, es decir que la esposa no se debe de sujetar
para hacer lo malo, pero en las cosas razonables, o como les dice el apóstol
Pablo: Como conviene en el Señor, ver
Colosenses 3:18, tiene que haber sujeción, porque
el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia,
siendo Él mismo el Salvador del cuerpo. Pero así como la iglesia está sujeta a
Cristo, también las mujeres deben estarlo a sus maridos en todo. Ah... Pero
también dice: Maridos, amad a vuestras
mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio a sí mismo por ella, ver
Efesios 5:23 al 25... y fue por eso que el apóstol Pedro dijo y aun nos sigue
diciendo: Y vosotros, maridos, igualmente,
convivid de manera comprensiva (Con conocimiento y sabiamente), con vuestras mujeres, como con un vaso
más frágil, puesto que es mujer, dándole honor como a coheredera de la gracia
de la vida, para que vuestras oraciones no sean estorbadas.”, ver Primera
de Pedro 3:7, Amén.
La sujeción es una recompensa y nace al sembrar amor... Recordemos, que
la mujer es un vientre (En figura y literal), y si es un vientre quiere decir
que de ella sale fruto... Sembramos amor, cosechamos amor; Sembramos
comprensión, cosechamos comprensión, pero SI sembramos gritos, ¿Qué cosechamos
esposos? Gritos...
Esto está tremendo y
lo tremendo de esto, es que SI nosotros padres, nos sumergimos en los ríos de
Dios seremos un manantial en nuestro hogar; Seremos de bendición en el hogar...
No habrá pleitos, no habrá discusiones, no habrá golpes, no habrá insultos ni
violencia...
¿Cuántos necesitamos y queremos sumergirnos en los ríos de Dios?
Y esa pregunta
también es para los hijos... por eso consejo: Hijos, SI “Hijos... obedeced a vuestros padres en el Señor, porque esto es justo.
Honra a tu padre y a tu madre (Que es el primer mandamiento con promesa), para
que te vaya bien, y para que tengas larga vida sobre la tierra. Y vosotros,
padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina e
instrucción del Señor.”, ver Efesios 6:1 al 4… por eso consejo: Padres,
antes de decirle algo a nuestros hijos, ya sea que tengan la culpa o no, pensemos
lo que le vamos a decir y como se lo vamos a decir (NO perdamos el control,
porque la falta de control demuestra falta de madurez y fruto del Espíritu)... Por
eso cuidemos nuestra boca para no ofenderlos con palabras vanas o vacías, como:
Tonto, necio, bruto, inservible, estúpido... Recordemos, lo que dice el libro
de Proverbios capítulo 15:1 “La suave
respuesta aparta el furor, más la palabra hiriente hace subir la ira.”...
La Biblia Nueva Versión Internacional dice: “La respuesta amable calma el enojo, pero la agresiva echa leña al
fuego.”...
Por eso quisiera
terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que el Rey de reyes
desea que en nuestros hogares fluyan sus ríos para que nuestros hogares sean bendecidos...
Y sean ricos... Ricos en buenas obras, ricos en gracia, ricos en amor, ricos en
misericordia, ricos en paz, ricos en perdón y olvido. Ah... Y también en lo
material... Los ríos de Dios traen consigo bendición, es decir: Comprensión, transformación
y evolución, es decir; Crecimiento y desarrollo... En otras palabras, traen
cambios y cambios en la mente y en el corazón...
Familia... Padres e
hijos, Dios desea que sus ríos corran en nuestro interior... ¿Para qué?
Para que cambiemos
nuestro corazón... Sus ríos van a hacer que nuestro corazón tenga su forma de
ser, es decir: De actuar y de pensar, ¿Para qué? Para que obedezcamos su bendita
Palabra, y nos revele Su propósito a nuestra vida... Amados, los ríos de Dios:
Nos van a alinear a
Él...
No vamos a
resistirnos a sus planes... y,
Haremos su voluntad la cual es buena agradable y perfecta...
Padres; Hijos,
busquemos con ahínco los ríos de Dios, porque los ríos de Dios nos harán
comprender, ¿A quién tenemos que servir?... Y, ¿A quién tenemos que obedecer?
¿Y
para que nos servirá saber eso?... Pregunto:
Para hacer la misma
voluntad de nuestro Padre celestial, ver Romanos 12:2...
29 de Febrero de 2020
Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo
Comentarios
Publicar un comentario
Que este tema sea de edificación para tu vida, gracias por tus comentarios!