LA MISIÓN DEL VERBO EN LA TIERRA, y LA NUESTRA….?

LA BIBLIA NOS HABLA:

“Pues ni aun el Hijo del Hombre vino para que le sirvan, sino para servir a otros y para dar su vida en rescate por muchos.” (Mateo 20:28) NTV

En este día quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que existen tres periodos que el Verbo tomó y tomará para llenar la tierra y el cosmos de su mensaje de salvación, es decir para salvar lo que Él creo y sigue creando ¿Por qué digo eso? Porque dice la Palabra en el libro de Colosenses capítulo 1:16 RVR 1960: “…en Él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de Él y para Él.”… Entonces, Dios creó todo por medio de Cristo y para Cristo, TLA… Todo lo que ha creado Cristo sale en perfecto estado de sus manos, lo lamentable es que lo creado se descalabra cuando se revela en contra de Dios, pregunto: ¿Por qué se revela el ser humano? POR LA CONSCIENCIA, es decir por el conocimiento... En otras palabras, por la libertad que tiene el ser humano tanto para hacer el bien como para hacer el mal, llámese: libre albedrío, pero permítame decirle, que la Biblia nos deja ver que la palabra libre albedrío no está escrita en ella, lo que está escrito es: debes escoger, debes elegir, debes decidir, porque dice: “…si a ustedes les parece mal servir al Señor, elijan ustedes mismos a quiénes van a servir: a los dioses que sirvieron sus antepasados al otro lado del río Éufrates, o a los dioses de los amorreos, en cuya tierra ustedes ahora habitan. Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor.”, ver Josué 24:15 NVI… Lo que estoy tratando de decir, es que el libre albedrío vino a separar al ser humano del reino de Dios… En otras palabras, En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios, y el Verbo descendió a la tierra a recuperar lo que Él había creado y sigue creando, ver Juan 1:1 y Colosenses 1:13 al 16… En otras palabras, el Padre envió a la tierra a su Hijo amado, en quien tenemos redención: el perdón de los pecados, a invitar por medio de dos acontecimientos simultáneos, llamados: arrepentimiento y conversión, a las personas que se encontraban y se encuentran en desobediencia ¿Para qué? Para que se integren nuevamente al reino de Dios… El arrepentimiento y la conversión son dos acontecimientos simultáneos, pero permítame decirle, en primer lugar: que existen personas que cuando aceptaron al Señor Jesucristo como su Señor y salvador no pudieron distinguir los dos acontecimientos simultáneos en el mismo acto… y en segundo lugar: que existen personas que reconocen nítidamente los dos acontecimientos simultáneos por separado, PERO EN EL MISMO ACTO.

Permítame que me ministre con usted: Cuando recibí el mensaje de salvación en un retiro espiritual el día domingo 16 de mayo del 2010, el Espíritu Santo cinceló en mi corazón ese mensaje, comencé a sentirme mal por lo que le había hecho a cada miembro de mi familia, me sentí avergonzado, a tal punto que comencé a creer que las personas que se encontraban a mi alrededor conocían mis pecados, comencé a llorar… Esto me recuerda, que la Palabra nos deja ver, que Juan el Bautista predicó un mensaje de arrepentimiento, ver Mateo 3:1 al 12, por otro lado nos deja ver claramente, que el hijo pródigo se arrepintió cuando el padre salió a su encuentro, porque dijo: “…Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; Reconoció su pecado; Se reconoció un pecador…”, ver Lucas 15:21, pero también nos deja ver, que el hijo pródigo se convirtió cuando el padre le dijo a sus siervos: “…Pronto; traed la mejor ropa y vestidlo, y poned un anillo en su mano y sandalias en los pies; y traed el becerro engordado, matadlo, y comamos y regocijémonos; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.”, ver Lucas 15:22 al 24… Estos versículos nos muestran claramente los dos acontecimientos simultáneos por separado, pero en el mismo acto, pero el punto es que lo que le sucedió al hijo pródigo me sucedió a mí… permítame que se lo explique: cuando recibí el mensaje de salvación, me arrepentí y me pregunté: ¿Qué debo hacer para cambiar? Antes del retiro visitaba una Iglesia y en esa Iglesia yo había querido cambiar, pero no lo logré, pero esta vez sentí la necesidad de cambiar… Entonces me pregunté: ¿Qué debo hacer para cambiar?, y el Espíritu de Dios que es tan bueno, me contestó: busca al Señor Jesucristo, le pregunté: ¿Cómo se busca?, me contestó: Entregándote a Él, ¿Cómo? le pregunté, permítele crecer en ti para que tu mengues, para que tu disminuyas, entonces le pregunté: ¿Cómo lo puedo lograr?, congregándote y capacitándote para que encuentres el propósito divino que Dios estableció en tu vida antes de haberte formado en el vientre de tu madre... y es por eso y muchas cosas más, que yo le puedo decir a usted con certeza, que el evangelio que NO nos haga redargüir, que el evangelio que NO nos muestre nuestras fallas, que el evangelio que NO nos haga sentir mal por nuestros pecados… Ese no es el evangelio de Cristo, porque el evangelio de Cristo penetra, porque el evangelio de Cristo transforma a las personas… y fue por eso que el apóstol Pablo dijo y aun nos sigue diciendo: “…la palabra de Dios tiene vida y poder. Es más cortante que cualquier espada de dos filos, y penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta lo más íntimo de la persona; y somete a juicio los pensamientos y las intenciones del corazón.”, ver Hebreos 4:12 DHH, pero el punto es que el Padre envió a su Hijo amado a la tierra a invitar a la humanidad a que se arrepienta y en el mismo acto se convierta, es decir a que cambie su vana manera de pensar, es decir su vana manera de vivir. Ese es el orden, pero lo lamentable de esto es que existen muchas personas que se creen convertidas sin haberse arrepentido… El arrepentimiento nos hace dar un giro de 360 grados, y nos hace preguntar: ¿Señor, qué debo de hacer para ser salvo?... y eso fue lo que les dijo el apóstol Pedro a aquellos hombres que se encontraban en el pórtico llamado de Salomón, después de predicarles, pues les dijo: “…Arrepentíos y convertíos, para que vuestros pecados sean borrados, a fin de que tiempos de refrigerio vengan de la presencia del Señor.”, ver Hechos 3:19, por eso permítame decirle, que los dos acontecimientos simultáneos, llámense: arrepentimiento y conversión… pero antes permítame decirle, en primer lugar: que el arrepentimiento, significa: reconocer el pecado, significa reconocerse pecador… y en segundo lugar: que convertirse, significa: cambiar las vestiduras y las sandalias… En otras palabras: “…si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”, ver Segunda de Corintios 5:17 RVR 1960… y fue por eso que el Señor Jesucristo dijo y aun nos sigue diciendo: “El árbol bueno sólo produce frutos buenos y el árbol malo sólo produce frutos malos.”, ver Mateo 7:17 TLA… pero el punto es que el arrepentimiento y la conversión nos lava, nos limpia, es decir nos renueva por medio del Espíritu Santo, CLARO. La conversión es un proceso, es como el niño que se forma en el vientre de su madre para ser expulsado y comenzar su crecimiento, pero el punto es que Cristo fue enviado a la tierra a una gran misión, que la tuvo que dividir en tres etapas, y son:

PRIMERA ETAPA.

El verbo vino a la tierra por primera vez a los suyos… El Verbo NO vino a cambiar la tierra, es decir NO vino a salvar a toda la humanidad… El Verbo vino como israelita a los israelitas… En otras palabras, el Verbo hecho carne descendió a la tierra a identificarse con los suyos para que se arrepintieran y se convirtieran… Esto sucedió hace más de 2,000 años atrás… Ejemplo Bíblico: Dice la Palabra en el libro de Marcos capítulo 5:18 al 20, que el gadareno “…le rogaba a Jesús que lo dejara acompañarle. Pero Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho por ti, y cómo tuvo misericordia de ti… Lo tremendo se encuentra en el siguiente versículo, porque dice que el gadareno se fue, y empezó a proclamar en Decápolis cuán grandes cosas Jesús había hecho por él; y todos se quedaban maravillados.”, pregunto: ¿Le gustaría ir a los suyos? ¿En dónde se encuentran los suyos? EN SU CASA y si ya no se encuentran en su casa ¿Que hizo por ellos? El gadareno fue a los suyos, pero tenía una tarea muy difícil, porque los suyos sabían perfectamente bien cómo vivía, y cuando tocó la puerta de su casa, su esposa se asomó y al asomarse se asustó y al asustarse exclamó: ¡Hijos es su padre!, el loco, el endemoniado ¿Qué hacemos? En eso volvió a tocar la puerta y dijo: mujer ábreme la puerta por favor, soy tu esposo, he cambiado, he sido restaurado, después de tanto ruego la esposa abrió la puerta y al verlo normal sus hijos lo abrazaron por primera vez… Lo que estoy tratando de decir es que nuestro Señor Jesucristo nos ordena hacer lo mismo que hizo el gadareno… En otras palabras, debemos de decirle a los nuestros lo que el Señor ha hecho en nuestra vida. CLARO, que es posible que los nuestros NO crean lo que el Señor ha hecho en nuestra vida, pero ese será su problema, pero el punto es que Cristo vino por primera vez a los suyos y les dijo a sus apóstoles: no vayan a los paganos, ver Mateo 10:5… Eso quiere decir que el evangelio solo fue para un pueblo… y fue por eso que Jesús le dijo a la cananea: “No he sido enviado sino a las ovejas pérdidas de la casa de Israel.”, ver Mateo 15:24… por eso, yo Juan Carlos Bonilla Guerrero no puedo tolerar a los cristianos que prefieren llevarle el mensaje de salvación a los extraños que a los de su propia casa y a los suyos… prefieren evangelizar a un muchacho de Etiopía que a su propio hijo o hija, prefieren traer a los pies de Cristo a las mujeres perdidas de la calle que a su propia mujer, pregunto: ¿Cuánto amaría Dios a los suyos que se olvidó del resto de la humanidad, es decir de usted y de mí?... Jesús vino a los suyos, Jesús vino a los de su raza aunque el provenía del cielo, y dice la Palabra que “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.”, ver Juan 1:11 RVR 1960, por eso les dijo: “¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que son enviados a ella!¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste!.”, ver Mateo 23:37… por eso consejo: si usted ya se arrepintió y se convirtió dígale a los suyos y a los de su casa lo que el Señor hizo en su vida… Recuerde, que la orden es ir, que la orden NO es ir y tener éxito siempre… Recuerde, que el éxito lo da el Señor, que el éxito proviene del Señor y NO DE NOSOTROS.

SEGUNDA ETAPA.

Dice la Palabra, que el Señor Jesucristo: “vino a lo suyo, y los suyos no le recibieron.”, ver Juan 1:11 RVR 1960… Y fue por eso que el Señor les dijo a los que NO lo rechazaron y al nuevo Israel, es decir a usted y a mí: “…Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.”, ver Marcos capítulo 16:15… Lo que estoy tratando de decir, pero antes permítame decirle, en primer lugar: que en la primera etapa el Cordero tenía doce apóstoles y que en ellos se basó para enviar setenta discípulos a evangelizar al pueblo de Israel… y en segundo lugar: que en la segunda etapa el Cordero tendrá a muchos apóstoles y ahora ya no enviará a setenta para ir al mundo sino que enviará a todo el que venga para ir… Esto es tremendo y es tremendo hermano, porque la segunda etapa nos deja ver que Cristo no vino a evangelizar a los vecinos, pero el punto es que Cristo quiere que usted y yo evangelicemos a nuestros vecinos y a los demás… pero para eso debemos de discipularnos ¿Por qué digo eso? Porque la Palabra nos deja ver claramente que Jesús discipuló y discipular significa: vivir el evangelio a la par de los que lo están oyendo ¿Por qué digo eso? Porque la Palabra nos deja ver que Jesús dormía con sus discípulos, que Jesús comía con sus discípulos, que Jesús evangelizaba con sus discípulos, que Jesús reposaba con sus discípulos, es decir que Jesús convivía con sus discípulos y eso se llama discipular… Lo que estoy tratando de decir es que en la primera etapa Cristo nos ordenó evangelizar a los nuestros y a los de nuestra propia casa y que en la segunda etapa nos está ordenando evangelizar a nuestros vecinos y a los más lejanos y hasta lo último de la tierra. ESE ES EL ORDEN, por eso permítame decirle, que si nosotros seguimos al pie de la letra las órdenes que nos está dando el Señor Jesucristo en esta segunda etapa, es decir que si seguimos las instrucciones tal como se las transmitió al pueblo de Israel, nosotros por medio del Espíritu Santo vamos a convertir almas para el Señor, vamos a imponer manos, vamos a sanar, vamos a liberar, vamos a abrir las ventanas de los cielos de los cielos… Quizás alguien se esté diciendo: hermano Juan Carlos, en que libro de la Biblia se encuentra lo que usted está diciendo. Escuche: en primer lugar, en el libro de Juan capitulo 14:12, pues dice: “En verdad, en verdad os digo: el que cree en mí, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores que éstas hará, porque yo voy al Padre.”… y en segundo lugar nos dice el libro de Marcos capitulo 16:17: “Y estas señales acompañarán a los que han creído: en mi nombre echarán fuera demonios, y hablarán en nuevas lenguas.”… Esto es tremendo y es tremendo hermano, porque esos versículos nos dejan ver claramente, que la Iglesia que no muestre en el ministerio señales y prodigios, está bajo el sub evangelio o está en su evangelio, porque el evangelio de Cristo es uniforme, porque el evangelio de Cristo tiene ministerios llenos de dones, de revelaciones, de señales y de prodigios… Recuerde, que la Iglesia de Cristo es la única que se puede mover bajo esta atmósfera ¿Por qué razón? Porque nosotros, es decir el nuevo Israel, es el único pueblo del Señor que tiene morando al Espíritu Santo… Quizás alguien se esté diciendo: hermano Juan Carlos, lo que usted está diciendo es que nosotros podemos hacer lo mismo que hizo nuestro Señor Jesucristo en su primera venida, SI, porque el Verbo bajó a la tierra como hombre ungido a ungir su cuerpo místico, llámese: Iglesia… Esto no lo digo yo. Esto lo dice nuestro Cristo ungido, pues dice: “Y estas señales acompañarán a aquellos que sí confían: En Mi Nombre expulsarán demonios, hablarán en nuevas lenguas.”, ver Marcos 16:17 Biblia Kadosh Israelita Mesiánica, por eso permítame decirle, que la misión de la Iglesia es repetir el ministerio de nuestro Cristo ungido aquí en la tierra… muchas personas me preguntan: ¿Qué debe de hacer la Iglesia? LO MISMO QUE HIZO CRISTO JESÚS… Eso no lo digo yo Juan Carlos Bonilla Guerrero, eso lo dice nuestro Cristo ungido, pues dice: “En verdad les digo: El que crea en mí hará las mismas obras que yo hago y, como ahora voy al Padre, las hará aún mayores.”, ver Juan 14:12 Biblia Latinoamericana 1995, Gloria a Dios, Aleluya...

TERCERA ETAPA.

Pregunto: ¿Cuál cree usted que sea la tercera misión del Verbo en la tierra, es decir la tercera etapa? Escuche con mucha mayor atención: Cuando el Señor descienda a las nubes “…con voz de mando, con voz de arcángel y con la trompeta de Dios, los muerto en Cristo resucitarán primero, y nosotros, los que estemos vivos y que permanezcamos…seremos transformados en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, para que comencemos y terminemos la tercera misión que nos encomendará en la tercera etapa, llámese: evangelizar el cosmos. ENTENDIERON…”, ver Primera de Tesalonicenses 4:16 al 17 y Primera de Corintios 15:51… permítame que se lo explique de la siguiente forma: cuando comience el arrebatamiento, el Señor descenderá a las nubes a glorificar a su Iglesia para que termine de predicar el evangelio del reino en el mundo y en el cosmos ¿Por qué digo eso?, en primer lugar, porque el libro de Mateo dice en el capítulo 24:14 RVR 1960: “Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.”… y en segundo lugar, porque el libro de Efesios dice en el capítulo 3:10 DHH: “…por medio de la iglesia, todos los poderes y autoridades en el cielo podrán conocer la sabiduría de Dios, que se muestra en tan variadas formas.”… por eso permítame recordarle, que Jesús vino en la primera etapa a redimir a su pueblo y se redimieron los que creyeron… y fue por eso que Jesucristo por medio del Espíritu Santo le encomendó al apóstol Pablo redimir a todos los paganos que creyeran en Jesús de Nazaret… Lo que estoy tratando de decir es que Jesús le encomendó en la segunda etapa al nuevo Israel, es decir a usted y a mí, anunciar el evangelio primeramente a los miembro de nuestra casa, y después a los nuestros, y después a los vecinos y al resto de la humanidad, pero ese no es el punto, el punto es que Jesús utilizará en la tercera etapa a la amada, a la paloma, a la esposa, a la Iglesia para que evangelice el cosmos y es aquí en donde haremos las obras mayores… Esto es tremendo y es tremendo hermano, porque en este momento NO estamos haciendo ni siquiera las obras que hizo nuestro Señor Jesucristo en la tierra, pero cuando Él venga a las nubes, todos los hombres de la tierra oirán el mensaje final y verán las obras mayores que Cristo Jesús nos prometió que haríamos en el libro de Juan capítulo 14:12. ENTENDIERON.

SI ENTENDIERON, permítame hacer un Test, primera pregunta: ¿Cuál fue la primera misión que le encomendó Jesús a sus apóstoles y a los 70? Evangelizar y redimir a los suyos… Esto es tremendo, porque la Palabra nos deja ver que NO se salvaron todos… segunda pregunta: ¿Cuál es la segunda misión que le encomendó Jesús al nuevo Israel, es decir a usted y a mí? Evangelizar y redimir en primer lugar, a cada miembro de nuestra familia; En segundo lugar, a los nuestros; En tercer lugar a los vecinos y a los desconocidos, pero eso no quiere decir que se salven todos... tercera pregunta: ¿Cuál es la tercera misión que le encomendará Jesús a Su Iglesia? Evangelizar y redimir todo lo que Él ha creado en nuestro universo, es decir en el cosmos y seguramente que no se salvarán todos ¿Por qué digo eso? Porque dice la Palabra en el libro de Filipenses, en el capítulo 2:9 al 11 NTV, que Dios elevó al lugar de máximo honor el nombre de Jesús “…para que, ante el nombre de Jesús, se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua declare que Jesucristo es el Señor para la gloria de Dios Padre.”, Jesús tiene que vencer a la maldad… Jesús tiene que vencer a la iniquidad… Jesús tiene que vencer a la muerte y a satanás, aunque en teoría ya los venció ¿Cuándo? Cuando resucitó, ver Segunda de Timoteo 1:10 y Hebreos 2:14, Aleluya.

Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que en estos tiempos, y que ya son finales, y que ya los estamos viviendo, debemos levantar nuestros ojos al cielo pensando solamente en la misión que nos encomendó el Señor Jesucristo en esta bendita tierra, llámese: Evangelizar a cada miembro de nuestra casa, y a cada miembro de nuestra familia, y todos los que estén al alcance de nuestras manos… Pero, debemos de llegar con un mensaje integral y tan pleno como el que les trajo el Señor Jesucristo a los de su pueblo… Jesús les dijo a los que creyeron en Él: Yo voy a vivir con ustedes el evangelio para que lo aprendan. Fíjense en lo que Yo hago… Él no se contentó con decirle a su pueblo desde el cielo: Los amo, sí pero nosotros estamos fritos aquí, sí pero nosotros estamos esclavizados aquí… Él no se contentó con decirle a su pueblo desde el cielo: Los amo mucho, sí pero nosotros estamos subyugados por el Imperio Romano, y por los fariseos, y por los escribas aquí… Ese hubiera sido un evangelio ridículo, y fue por eso que el Verbo descendió del cielo a convivir con ellos… por eso, consejo y no mío sino del Señor Jesucristo: “…Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.”, ver Marcos 16:15… En otras palabras, lo que nos está diciendo el Señor Jesucristo es: vayan con su familia, y con los suyos, y con sus vecinos, y con los extraños a convivir el evangelio para que se arrepientan y se conviertan… Recuerden, que Jesucristo les enseñó a sus discípulos los cinco ministerios primarios, Él les dijo, existe un ministerio apostólico, Yo soy el apóstol; Existe un ministerio profético, Yo soy el profeta; Existe un ministerio evangelista, Yo soy el evangelista; Existe un ministerio pastoral, Él es el pastor por excelencia; Existe un ministerio magistral, Él es el maestro por excelencia… Lo que estoy tratando de decir es que en el cuerpo de Cristo Jesús se encuentran los cinco ministerios y si se encuentran en Él los cinco ministerios, quiere decir que el cuerpo místico, llámese Iglesia, debe tener también los cinco ministerios primarios, porque Cristo Jesús es la cabeza de la Iglesia… y esto el perito arquitecto de la Iglesia de Cristo Jesús nos los afirma diciendo: “…ustedes son el cuerpo de Cristo, y cada uno de ustedes es un miembro con su función particular. Dios ha querido que en la iglesia haya, en primer lugar, apóstoles; en segundo lugar, profetas; en tercer lugar, maestros; luego personas que hacen milagros, y otras que curan enfermos, o que ayudan, o que dirigen, o que hablan en lenguas.”, ver Primera de Corintios 12:27 al 28 DHH… por eso consejo: Sujetemos nuestra voluntad a la voluntad del Padre para que el Hijo por medio de su evangelio se manifieste en nuestra vida… En otras palabras, para que nuestra familia y los nuestros y los vecinos y los más lejanos se arrepientan y se conviertan, y una vez convertidos comiencen el proceso del nuevo nacimiento… por eso me pregunto y le pregunto: ¿Queremos conquistar nuestra casa, nuestros hijos, nuestros nietos, nuestros padres y nuestros hermanos? VIVAMOS EL EVANGELIO con los demás, porque ¿si no hay un mañana, que será de nuestro cónyuge, de nuestros hijos, de nuestros nietos, de nuestros padres, de nuestros hermanos y tíos?… y fue por eso que el Señor Jesucristo vino en primer lugar, a los suyos para dejarnos el ejemplo… y en segundo lugar, vino por medio del Espíritu Santo para dejarnos el ejemplo hacia los demás… por eso consejo: Enseñémosle a cada miembro de nuestra casa, y a los nuestros, y a los vecinos, y a los que estén al alcance de nuestra mano a vivir el evangelio por medio de nuestro ejemplo y por medio de la Palabra de Dios, humillémonos pues bajo la mano poderosa de Dios para que su gracia sea derramada en nuestra debilidad.

03 de Marzo de 2018
Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo