CRISTO ES EL PAN DE LA VIDA, PARTE II


LA BIBLIA NOS HABLA:

“Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno come de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo también daré por la vida del mundo es mi carne.” (Juan 6:51)

En este día quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Señor, recordando lo que el Señor Jesucristo nos dijo por medio de su Palabra en la última santa cena que celebramos en el mes de diciembre del año pasado, y dijo: lo que ustedes deben de anunciar, y de celebrar, y de recordar es la muerte y la resurrección de nuestro Señor Jesucristo ¿Por qué digo eso? Porque Él mismo dijo y aun nos sigue diciendo: “De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.”, ver Juan 12:24 RVR 1960… Eso quiere decir en primer lugar: que la muerte del Señor Jesucristo representa el pan… y en segundo lugar: que los frutos representan la novedad de vida… y fue por eso que Él mismo dijo y aun nos sigue diciendo: “…Esto es mi cuerpo, PAN, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. De la misma manera tomó la copa después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que es derramada por vosotros, VINO.”, ver Lucas 22:19 al 20… y fue por eso que el apóstol Pablo dijo y aun nos sigue diciendo en el libro de Primera de Corintios capitulo 11:26 NTV: “…cada vez que coman este pan y beban de esta copa, anuncian la muerte del Señor hasta que él vuelva.”, por eso permítame decirle, que a nosotros NO nos han llamado a celebrar el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo… que a nosotros nos han llamado a celebrar dos ordenanzas que tienen que ver con la muerte y la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, y es más dice la Palabra en el libro de Eclesiastés capítulo 7:1 DHH: “…Vale más el día en que se muere que el día en que se nace.”… Lo que hizo el Señor Jesucristo es ilógico para la mente humana… Lo que hizo el Señor Jesucristo es un fracaso para la mente humana, PERO NO ES ASÍ, porque nosotros sabemos que de la muerte de nuestro Señor Jesucristo surgió la resurrección, es decir la vida eterna, es decir la inmortalidad que nos alcanzó y que sigue alcanzando a otros… Lo que estoy tratando de decir es que nosotros hemos sido llamados sin lugar a dudas a morir en Cristo Jesús… En otras palabras, “…todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa del Señor Jesucristo, la hallará, la encontrará, la salvará.”, ver Mateo 16:25 RVR 1960, LBLA, NVI, DHH y TLA, por eso permítame decirle, que en este día, vamos a anunciar, y a celebrar, y a recordar la gran victoria que obtuvo nuestro Señor Jesucristo sobre la muerte eterna… Claro que al anunciar, y que al celebrar, y que al recordar la muerte de nuestro Señor Jesucristo, NOSOTROS estamos muriendo al yo ¿Por qué digo eso? Porque cuando participamos de la mesa del Señor dignamente nos estamos uniendo a Él en su muerte y en su resurrección… y eso es lo que nos está diciendo el apóstol Pablo, en primer lugar, en el libro de Romanos capítulo 6:5 al 7, porque dice: “…si hemos sido UNIDOS A ÉL en la SEMEJANZA DE SU MUERTE, ciertamente lo seremos también en la SEMEJANZA DE SU RESURRECCIÓN (bautizo en agua), sabiendo esto, que nuestro VIEJO HOMBRE FUE CRUCIFICADO CON ÉL, PARA QUE NUESTRO CUERPO DE PECADO FUERA DESTRUIDO, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado; porque el que ha muerto, ha sido libertado del pecado.” y en segundo lugar, en el libro de Filipenses capítulo 3:8 al 11, porque dice: “Y aún más, yo estimo como pérdida todas las cosas en vista del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, MI SEÑOR, por quien lo he perdido todo, y lo considero como BASURA A FIN DE GANAR A CRISTO, y ser hallado en Él, no teniendo mi propia justicia derivada de la ley, sino la que es por la fe en Cristo, la justicia que procede de Dios sobre la base de la fe, y CONOCERLE A ÉL, EL PODER DE SU RESURRECCIÓN Y LA PARTICIPACIÓN EN SUS PADECIMIENTOS, llegando a ser como él en su muerte, a fin de llegar a la resurrección de entre los muertos.”… En otras palabras, lo que nos está diciendo el apóstol Pablo, es: Nosotros nos hemos unido a nuestro Señor Jesucristo por medio de su muerte y de su resurrección ¿Cuándo?, en primer lugar, cuando nos bautizaron en agua… y en segundo lugar, cuando participamos dignamente de la mesa del Señor… En el bautismo la inmersión representa la muerte y la emersión representa la resurrección, en cambio en la santa cena el pan representa la muerte y el vino representa la novedad de vida, según el libro de Romanos capítulo 6:4… por eso consejo: Hijos e hijas del Dios altísimo deben de anunciar, de celebrar, y de recordar solamente la muerte de nuestro Señor Jesucristo por medio de la santa cena… y ahora viene el Señor Jesucristo y nos dice, en el libro de Juan capítulo 6:35: “…YO SOY EL PAN DE LA VIDA; el que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed.”... Esto es tremendo y es tremendo hermano, porque la Palabra nos deja ver claramente, que así como necesitamos sumarle a la verdad los diferentes tipos de palabras que aparecen en la Escritura para llegar a la verdad, es decir la palabra de fe, la palabra martillo, la palabra de ciencia, la palabra de sabiduría, la palabra de la cruz, la palabra de la gracia, debemos de sumarle también al pan de la vida los diferentes tipos de panes que aparecen en la Escritura, para que podamos ver los beneficios que nos da Dios por medio del pan de la vida, llámese: Señor Jesucristo... Lo que estoy tratando de decir es que el pan de la vida es una de las manifestaciones como se manifestó nuestro Señor Jesucristo en esta bendita tierra ¿Por qué digo eso? Porque dice la Palabra que nuestro Señor Jesucristo también se manifestó como la vid verdadera, como la puerta, como la luz del mudo, como la verdad y la vida, como la vida eterna, como la resurrección y la vida, como el agua de la vida, como el camino y como el buen pastor… pero ese no es el punto, el punto es que el Señor Jesucristo nos quiere regalar por medio del pan de la vida muchos beneficios… por eso, mejor abramos nuestras Biblias en el libro de Éxodo, en el capítulo 29:34 Biblia Jerusalén Tercera Edición, para que el Señor de señores y Rey de reyes nos muestre un beneficio del partimiento DEL PAN DE LA VIDA.

Si a la mañana siguiente sobra algo de la carne o del pan de la investidura, quemarás este resto; no ha de comerse, porque es cosa sagrada.”

Este versículo nos deja ver claramente, que en el pan de la vida SE ENCUENTRA el pan de la investidura… Eso quiere decir hermano, que cuando nos estemos comiendo el pan de la santa cena nos vamos a estar comiendo el pan de la vida, y que cuando nos estemos comiendo el pan de la vida nos vamos a estar comiendo el pan de la investidura, pregunto: ¿Qué es investidura? Quizás alguien se esté diciendo: Hermano Juan Carlos investidura es cuando lo enviste un toro a uno, NO, eso se llama: embestir, por eso permítame decirle, que investidura es la acción de investir y que investir significa: conferirle a alguien una dignidad o cargo importante… Eso quiere decir que cuando nos estemos comiendo el pan de la santa cena, llámese: el pan de la vida, el pan de la investidura, nos van a dotar de la dignidad que según el diablo NO nos merecemos, pero que a Dios le plació en su misericordia darnos… En otras palabras, la investidura es = a la honra. La honra que debe de venir en estos tiempos de aflicción a nuestra vida, “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, tendréis tribulación; pero confiad, yo he vencido al mundo, nos dice el Señor Jesucristo.”, ver Juan 16:33 RVR 1960… En otras palabras, en estos tiempos de deshonra “Bienaventurados serán los cristianos que por la causa del Señor Jesucristo los vituperen, los insulten y los persigan, y digan toda clase de mal contra ustedes, mintiendo.”, ver Mateo 5:11 RVR 1960… Este versículo nos deja ver que la deshonra puede ser privada o pública… y cuando digo privada puede ser hasta en su propia casa, es decir que sus padres y sus hermanos nunca le den el lugar que usted se merece como le sucedió a David ¿Por qué digo eso? Porque la Palabra nos deja ver que el padre y los hermanos de David le dieron su lugar finalmente, es decir que lo honraron hasta que todos se convirtieron en perseguidos políticos ¿Por quién? Por el rey Saúl, usted ya conoce la historia, el padre lo menosprecio cuando llegó a ungirlo el sacerdote Samuel y los hermanos lo menospreciaron cuando el padre lo envió al campo de batalla para que le informara del estado de ellos… por eso permítame decirle, que a veces necesitamos una persecución, que a veces necesitamos una tribulación para dejar a un lado alguna diferencia que tengamos, ya sea en la Iglesia, o en la casa, o en el trabajo, o en la escuela, o que se yo… Lo que estoy tratando de decir es que si alguien nos deshonra, o nos mancha nuestra alma, o nos mancha nuestro nombre, es decir nuestra vida NO nos debe de importar, porque el pan de la vida nos confiere una dignidad y la dignidad nos devuelve la honra… El pan de la investidura nos quita la deshonra… El pan de la investidura nos devuelve un cargo importante… El pan de la investidura nos devuelve lo que nos negaron las personas... Esto es lo que hace Dios y es parte del PAN DE LA VIDA.

Ahora, miremos Levítico capítulo 23:17 La Biblia del Oso 1569.

“De vuestras habitaciones traeréis el pan de la mecedura, dos décimas de flor de harina serán
leudo será cocido, primicias à Jehová.”

¿Qué es mecedura? Mecedura significa oscilación… Eso quiere decir que el pan de la vida se manifiesta en el pan de la mecedura y que el pan de la mecedura se transforma en el pan de la oscilación, pregunto: ¿Qué es oscilación? Oscilación es el espacio requerido por un cuerpo oscilante, entre sus dos posiciones extremas… y es aquí en donde surge la pregunta de los 20 pesos: ¿Tenemos posiciones extremas?, por eso permítame decirle, que lo único que nos puede ayudar a salir de las posiciones extremas de nuestra vida es el pan de la vida que se manifiesta en el pan de la mecedura… Quizás alguien se esté diciendo: Hermano Juan Carlos me podría explicar de nuevo lo que significa el pan de la mecedura, el pan de la oscilación, porque no entendí... Dice la Palabra en el libro de Proverbios, en el capítulo 30:7 al 9 NTV: “Oh Dios, te ruego dos favores; concédemelos antes de que muera. Primero, ayúdame a no mentir jamás. Segundo, ¡no me des pobreza ni riqueza!, la oscilación sería la riqueza y la pobreza, los dos extremos pueden llegar a ser peligrosos ¿Por qué digo eso? Porque el proverbista dice: Dame solo lo suficiente para satisfacer mis necesidades. Pues si me hago rico, podría negarte y decir: ¿Quién es el Señor? Y si soy demasiado pobre, podría robar y así ofender el santo nombre de Dios... En otras palabras, Señor yo necesito lo justo, porque los extremos me pueden llevar a cometer dos tremendos pecados ¿Por qué? Porque si tengo mucho me voy a saciar y al saciarme te voy a negar, voy a decir: Todo lo que tengo lo tengo porque me esforcé, pero si no tengo voy a robar y al robar voy a profanar Tu nombre.”… por eso consejo y no mío, sino del apóstol Juan: ¿Queremos ser prosperados en todas las cosas, y tener buena salud?, PROSPEREMOS EL ALMA, ver 3 Juan 1:2 RVR 1960… pero ese no es el punto, el punto es que el Señor es el único que nos puede ayudar a sobre llevar los dos extremos que nos toque vivir en esta bendita tierra por medio del pan de la vida, que se manifiesta en el pan de la mecedura… Recuerde, que siempre va a existir la luz y las tinieblas, que siempre va a existir la vida y la muerte, que siempre va a existir la riqueza y la pobreza, que siempre va a existir la abundancia y la escasez... Eso no lo digo yo, eso lo dijo el apóstol Pablo, y dijo: “Sé lo que es vivir en la pobreza, y lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a vivir en todas y cada una de las circunstancias, tanto a quedar saciado como a pasar hambre, a tener de sobra como a sufrir escasez.”, ver Filipenses 4:12 NVI… Eso quiere decir hermano, que en medio de la prueba se manifiesta la victoria, por eso permítame decirle, que Dios tiene un propósito para nuestra vida, que Dios no tiene despropósitos para nuestra vida… Lo que estoy tratando de decir es que lo que nos suceda en nuestra vida, sea bueno o sea malo, NO sucede porque el diablo le jugó la vuelta a Dios, DIOS TIENE EL CONTROL DE NUESTRA VIDA, lo que sucede es que Dios le dio permiso al diablo para que nos tiente como lo hizo con Job y el apóstol Pedro, ver Job 1:6 al 12 y Lucas 22:31, pero recuerde, que “…Dios es fiel, y no le permitirá al diablo que nos tiente más allá de lo que podamos soportar. Más bien, cuando llegue la tentación, Él nos dará también una salida para que podamos resistir.”, ver Primera de Corintios 10:13 NVI, pero ese no es el punto, el punto es que el pan de la vida es el pan que se manifiesta en el pan de la mecedura, en el pan de la oscilación y que ese pan es el único pan que nos puede fortalecer los dos extremos de nuestra vida, sea la alegría o la tristeza, sea la dulzura o la amargura, sea la sanidad o la enfermedad, sea la riqueza o la pobreza, sea la abundancia o la escasez, sea la verdad o la mentira, sea la sabiduría o la ignorancia, sea lo que sea hermano.

Ahora, miremos Primera de Crónicas capítulo 9:32.

“Y algunos de sus parientes, de los hijos de Coat, estaban encargados de los panes de la proposición para prepararlos cada día de descanso.”

Antes que el Señor me ayude a desarrollar este versículo permítame decirle, en primer lugar: que los panes de la proposición se encontraban en el Lugar Santo… y en segundo lugar: que los sacerdotes de Coat colocaban todos los días de reposo o de Shabbath los panes de la proposición en dos grupos de seis, en la mesa de la presencia, entre paréntesis, este pan es el pan que le dio el sacerdote a David cuando era perseguido por el rey Saúl, ver primera de Samuel 21:6, pero ese no es el punto, el punto es que los sacerdotes tenían que cambiar en el día de reposo todos los panes de la proposición. El día que trabaja Dios en nosotros… Recuerde, que nosotros debemos de trabajar el día primero, el día segundo, el día tercero, el día cuarto, el día quinto y el día sexto, porque Dios trabaja en nuestro día de reposo. Nosotros hacemos lo posible y a Dios le toca hacer lo imposible, ver Lucas 18:27, pero ese no es el punto, el punto es que los sacerdotes tenían que cambiar los panes de la proposición en los días de reposo, y lo interesante de esto hermano es que los panes de la proposición en el original significa el rostro de Dios, es decir Peniel (H 6439), o Paniym (H6440)… Hermano Juan Carlos ¿Qué es Peniel y que es Paniym? “Jehová te bendiga, y te guarde. Este es el Atrio; Jehová haga resplandecer su rostro, su Paniym sobre ti, y tenga de ti misericordia. Este es el Lugar Santo; Jehová alce sobre ti su rostro, su Paniym y ponga en ti paz. Este es el Lugar Santísimo.”, ver Números 6:24 al 26 RVR 1960... Esto es tremendo y es tremendo hermano, porque la palabra Peniel proviene de la palabra Paniym, que quiere decir: EL ROSTRO DE DIOS… Dice la Palabra en primer lugar, en el libro de Génesis capítulo 32:22 al 30, que Jacob tuvo su segundo encuentro con Dios en Peniel… y en segundo lugar: que Jacob tuvo su primer encuentro con Dios en Betel y Betel significa: CASA DE DIOS, ver Génesis 28:10 al 22… Lo que estoy tratando de decir es que Jacob reconoció que Dios era poderoso en Betel, y aun así no cambió ¿Por qué digo eso? Porque dice la Palabra que cuando Jacob llegó a la tierra de su madre, tuvo cuatro mujeres y siguió mintiendo, siguió engañando, engañó a Labán y Labán lo engañó a él, pero el punto es que Jacob llegó a Peniel, y dijo: Me encuentro solo. Esta es mi oportunidad, ya no puedo seguir mintiendo, ya no puedo seguir engañando, ya no puedo seguir estafando. Voy a luchar con el hombre y con Dios y no lo soltaré hasta que me bendiga, pregunto: ¿Cuál era la bendición que andaba buscando Jacob? QUE LE CAMBIARAN EL NOMBRE, en parte, es decir que le cambiaran su naturaleza y como consecuencia su nombre… Lo que estoy tratando de decir es que nosotros nos debemos de aferrar en esta santa cena a Peniel, es decir a Paniym, es decir al rostro de Dios, es decir a los panes de la proposición, es decir al pan de la vida, llámese: SEÑOR JESUCRISTO ¿Para qué? Para que nos purifique, para que nos lave, para que nos renueve y para que nos restaure el Espíritu de Dios que mora en nosotros, ver Primera de Corintios 3:16… En otras palabras, para que nos cambie la vana manera de vivir que heredamos de nuestros padres, ver Primera de Pedro 1:18… En otras palabras, para que nos cambie las obras de la carne, es decir la soberbia, la prepotencia, el orgullo, la altivez, la gritería, la mentira, el engaño, la malicia, la inmoralidad, la sensualidad, la idolatría, la impureza, la hechicería, las enemistades, los pleitos, los celos, los enojos, las iras, las rivalidades, las disensiones, las herejías, las envidias, las borracheras, las orgías, las palabras groseras y toda clase de mala conducta, es decir para que nos cambie la naturaleza y nos dé un nombre nuevo como se lo dio a Jacob… por eso consejo: Cuando participemos de la mesa del Señor hagámoslo con Fe… Hagámoslo pensando en los beneficios que nos da EL PAN DE LA VIDA… 

Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo, que Dios es bueno, que Dios es fiel, que Dios tiene el control de nuestra vida y de nuestra familia, que Dios es grandioso, que Dios es poderoso, “He aquí, no se adormecerá ni dormirá Él que guarda a Israel.”, ver Salmos 121:4 RVR 1960… El que nos guarda es el pan de la vida; Es el pan de la investidura; Es el pan de la mecedura, de la oscilación, de los extremos; Es el pan de la proposición… Lo que estoy tratando de decir es que el pan de la vida es el único pan que nos puede devolver la honra, la dignidad, la fortaleza, el equilibrio y sobre todo nos puede inundar del rostro de Dios, el rostro que nos hará decirle “…a la tribulación, o a la angustia, o a la persecución, o al hambre, o a la desnudez, o al peligro, o a la espada: De ustedes somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.”, ver Romanos 8:35 al 39… por eso permítame decirle, que el pan de la vida es el que sana, sacia y cura nuestros dolores...


06 de Enero de 2018
Ministerio Familiar Generación Apartada para Cristo

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