LA CASA SOBRE LA ROCA

 La semana pasada el Señor nos mostró lo que significa Realmente amar a Dios, por medio de un principio, que dice: Primero es lo primero, y segundo es lo segundo, y tercero es lo tercero... Y según la Palabra del Señor nuestro Dios, pregunto:

 ¿Qué es lo primero?

Amar al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu fuerza, y con toda tu mente; Y a tu prójimo como a ti mismos, ver Lucas 10:27...

Entonces, primero es lo primero y aunque todos lo sabemos no todos lo cumplimos... Hermano; Hermana, lo primero es: Amar, Y el Señor nuestro Dios, Quiere, que usted y yo, lo amemos y como primero es lo primero... Entonces, enamorémonos del Señor; Amemos a Dios para que podamos amarnos a nosotros mismos, porque SI usted y yo No nos amamos a nosotros mismos, No vamos a poder amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos... Y para que podamos cumplir con todo lo anterior tenemos que estar cimentados sobre la Roca... Tenemos que estar fundamentados sobre la Roca... Tenemos que estar parados sobre la Roca, y la Roca se llama: Cristo, la Roca se llama: Señor Jesucristo...  

Y hoy, el Señor nos quiere bendecir por medio de esta Su enseñanza, que lleva como título:

LA CASA SOBRE LA ROCA

Y para eso, le pido, en el nombre de Jesús, que me acompañe a leer y le ponga mucha, pero mucha mayor atención a cada versículo que vamos a leer con la ayuda del Señor, porque Él mismo por medio de ellos, Quiere derramar sobre nosotros y sobre cada miembro de nuestra amada familia, de Su bondad y misericordia... Por eso, abramos nuestras Biblias, pero antes permítame decirle, que con el hecho de solo pensar de que nuestro nombre ha sido inscrito en el libro de la vida es para que usted y yo vivamos de rodillas, Todos los días con una gratitud tremenda por ese sacrificio... Por el sacrificio perfecto, que hizo Cristo Jesús por usted y por mí... Entendido. Entonces, una vez entendido abramos nuestra Biblia en el libro de Juan capítulo 3:16 al 17, TLA, para que comencemos con esta enseñanza del Señor:

Dios amó tanto a la gente de este mundo, que me entregó a mí, que soy su único Hijo, para que todo el que crea en mí no muera, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no me envió a este mundo para condenar a la gente, sino para salvarla... Y ahí se encuentra usted y me encuentro yo amado hermano...

Jesús, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a nosotros. Y hallándose en nuestra forma se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz, ver Filipenses 2:6 al 8...

Pero, ¿Para qué?

Para sobrellevar nuestros sufrimientos y nuestras alegrías, porque engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿Quién lo conocerá? Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, ver Jeremías 17:9 al 10, RVR 1960...

Hermano; Hermana, cuando leí esos versículos conmovió mi corazón, y me dije:

¿Por qué, a veces, nosotros somos mal agradecidos?

Porque le permitimos al enemigo que nos haga temblar, cuando hubo alguien que no se bajó de la cruz del Calvario por amor a ti y por amor a mí; Que derramó su sangre para perdonar nuestros pecados; Que descendió al infierno para que tu ni yo descendiéramos... Escuche: Si Él hizo eso por nosotros, ¿Cómo podemos pensar que Él no va a estar con nosotros en cada instante de nuestra vida? Hermano; Hermana, Su fidelidad es grande, Incomparable es Su fidelidad, No hay nadie como Él, grande es Su fidelidad... 

 ¿Qué le quiero decir hermano?  

Que cuando estemos pasando por el valle de sombra de muerte, o por algún desierto, o por situaciones duras, Según nosotros, aferrémonos a esos versículos, y digamos: Nuestro Señor y Dios no es malo, es bueno, Y SI hizo tanto por mí, Él mismo me va a perfeccionar... Nuestro Padre celestial No es chapucero como nosotros, ya que lo que Él hace no lo deja a medias, lo termina, pues escrito está: El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará, ver Filipenses 1:6... Pero eso No quiere decir que usted y yo nos tenemos que quedar tal cual como se quedó Newton, sentado debajo de un manzano hasta que le cayera la manzana en la cabeza para decir: Ahora entiendo... No, nosotros tenemos que accionar sin dejar a un lado nuestra Fe, porque recuerde, que la Fe sin obras está muerta, ver Santiago 2:17... En otras palabras: Una cosa he pedido al Señor, y esa buscaré, ver Salmos 27:4... En otras palabras: Pedid, y se os dará; Buscad, y hallaréis; Llamad, y se os abrirá, ver Mateo 7:7... Entendieron. Entonces, el que comenzó en nosotros la buena obra la va a terminar, le guste o NO le guste al enemigo, pero tenemos que accionar, y tenemos Papá, Amén...  

Ahora, leamos Isaías capítulo 53:3 al 8:

Fue despreciado y desechado de los hombres, varón de dolores y experimentado en aflicción; Y como uno de quien los hombres esconden el rostro, fue despreciado, y no le estimamos. Ciertamente Él llevó nuestras enfermedades, y cargó con nuestros dolores; Con todo, nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y afligido. Mas Él fue herido por nuestras transgresiones, molido por nuestras iniquidades. El castigo, por nuestra paz, cayó sobre Él... Entre paréntesis: Lo que Él hizo por usted y por mí, lo hizo en carne y sangre para que cuando nosotros digamos: Ya no aguanto más... Yo me imagino, que cuando uno se encuentra en ese estadio de aflicción o de angustia, Dios sonríe diciendo: Porque te preocupas SI Yo te llevo entre mis brazos... Hermano; Hermana, hay momentos en la vida que uno dice; Bueno, por lo menos yo lo he dicho: ¡Abba Padre! Ya no aguanto más, me está lloviendo hasta por debajo de la lengua. Y ya soy salvo, y mi nombre está inscrito en el libro de la vida; Así que, por favor, Papito lindo, llévame a Tu presencia, Y en eso oigo una voz del cielo, que me dice: Lo que tú me estas pidiendo no te lo puedo conceder, porque Yo para eso y más NO he venido al mundo... Yo he venido a darte vida, y vida en abundancia, ver Juan 10:10... Yo Soy tu socorro y en las sombras de mis alas te acogeré... Por eso, permítame decirle, que SI el enemigo le ha querido jugar muy rudo, es decir: Le ha puesto un espíritu de miedo, o de estrés, o de depresión o de muerte, permítame decirle que no tema su corazón, porque el Señor nuestro Dios no vino a quitarnos la vida, vino a darnos vida, y vida en abundancia. Así que, No le tema tu corazón al diablo, porque el calumniador no puede hacer más de lo que Dios le permite... Dice la Biblia, que cuando Dios le permitió a Satanás que tocara a Job, Satanás le dijo: ¡Piel por piel!, y Dios le dijo: He aquí, él está en tu mano; Pero guarda su vida, ver Job 2:4 al 6...

 ¿Qué le quiero decir amado hermano?

Fortalezcamos nuestro ánimo, exhortándonos y perseverando en la Fe, diciendo: Es necesario que a través de muchas tribulaciones y de muchas aflicciones entremos en el reino de Dios, ver Hechos 14:22... En otras palabras, las pruebas son necesarias en nuestra vida, Y nos van a llegar, nos guste o no nos guste, y cuando nos lleguen, recuerde: Tenemos Papá y nuestro Padre celestial le pone límites a nuestro enemigo... Y recuerde lo que dice Su Palabra: Ustedes pueden confiar en Dios, porque Él no los dejara que ustedes sean sometidos a una prueba más allá de lo que puedan resistir Y/o soportar, ver Primera de Corintios 10:13 RVC... Sigamos leyendo: Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, nos apartamos cada cual por su camino; Pero el Señor hizo que cayera sobre Él la iniquidad de todos nosotros. Fue oprimido y afligido, pero no abrió su boca; Como cordero que es llevado al matadero, y como oveja que ante sus trasquiladores permanece muda, no abrió Él su boca. Por opresión y juicio fue quitado; Y en cuanto a su generación, ¿Quién tuvo en cuenta que Él fuera cortado de la tierra de los vivientes por la transgresión de mi pueblo, a quien correspondía la herida... Nosotros éramos los culpables... Nosotros éramos los pecadores, pero por amor a nosotros, Él, Jesús, Cristo Jesús, llevó por nosotros nuestras transgresiones, pecados e iniquidades, Y por eso ahora, es que usted y yo somos templo y morada del Espíritu Santo, es decir: Somos la casa de Dios, es decir: Somos la morada en la que Él habita en nosotros. Y por ello, tenemos que estar fundamentados en Cristo Jesús, nuestra Roca... Y fue por eso que el salmista dijo: Solo Él es mi Roca y mi Salvación, mi Refugio, nunca seré sacudido, Amén, ver Salmos 62:6...

Ahora, leamos Cantares capítulo 1:17:

Las vigas de nuestras casas son de cedros, nuestros artesonados, cipreses...

Este versículo nos muestra cuales son las características o, mejor dicho: Como tiene que estar construida la amada Y/o Iglesia, que anhela ser arrebatada... Ahora, leamos el contexto de este versículo, que se encuentra en el libro de Mateo capítulo 7:24 al 27:

Por tanto, cualquiera que oye estas palabras mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca; Y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; Pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca. Y todo el que oye estas palabras mías y no las pone en práctica, será semejante a un hombre insensato que edificó su casa sobre la arena; Y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; Y cayó, y grande fue su destrucción...

Ahora, leamos el libro de Lucas capítulo 6:48, para que miremos a través de la Escritura como desea el Señor que nuestra vida este fundamentada y edificada:

Es semejante a un hombre que al edificar una casa, cavó hondo y echó cimiento sobre la roca; Y cuando vino una inundación, el torrente dio con fuerza contra aquella casa, pero no pudo moverla porque había sido bien construida...

Hermano; Hermana, cuando vengan las pruebas, Él no nos desamparará, porque Él cumple Su Palabra. Así que, confiemos en Sus promesas y descansemos en Su Palabra... Hermano; Hermana, cuando nos encontremos en medio de una tormenta, en medio de una tempestad o en medio de una turbulencia o de una ola muy alta, tenemos que decir: Mi casa, mi templo, No podrá ser movido por nada ni por nadie, porque mi vida ha sido fundada sobre la Roca, porque mi vida ha sido bien construida por el Señor, que es mi Roca... Escuche: Cada prueba que venga a nuestra vida, No es para destruirnos, es para que nos preparemos para recibir al Señor, porque Él desea con todo su corazón, que usted y yo amado, estemos preparados para Su venida en secreto, Y para eso Él mismo, Quiere, quitar de nosotros todo aquello que no le agrada, es decir: Todo lo que no pertenece a Él, Amén...

Hoy, estamos leyendo y estudiando la Palabra del Señor, y por eso te pido, en el nombre de Jesús, que le pongas mucha mayor atención, porque puede ser que lo que dice Su Palabra, sea lo que nosotros estemos viviendo como familia, Y no nos damos cuenta que el Señor ya nos vio, tal cual como lo hizo con Naamán el sirio... Leamos lo que el Señor hizo por Naamán, y que se encuentra en el libro de Segunda de Reyes capítulo 5:1 al 5, TLA:

Naamán era general del ejército de un país llamado Siria. Era un hombre muy importante y el rey lo quería mucho porque, por medio de él, Dios le había dado grandes victorias a Siria. Pero este valiente soldado tenía una enfermedad de la piel llamada lepra... Permítame: La lepra es símbolo del pecado... Sigamos leyendo: A veces los sirios iban y atacaban a los israelitas. En una de esas oportunidades, tomaron prisionera a una niña que fue llevada a la casa de Naamán para ayudar a su esposa... Permítame: Mire como actúa Dios, mire la misericordia de Dios, nosotros a veces fallamos, Somos infieles, Y Él Siempre permanece fiel con nosotros... Naamán atacó a los israelitas y tomó prisionera a una niña y la llevó a su casa para que le ayudara a su esposa, Y esa niña le dijo a la esposa de Naamán: ¡Si mi patrón fuera a ver al profeta Eliseo, que vive en Samaria, se sanaría de la lepra! ¿De dónde venía la niña? De Israel... Dios, Siempre pone un atalaya sobre nosotros... Dios, Siempre pone un siervo sobre nosotros para bendecirnos, Y nosotros, a veces, pensamos por nuestra infidelidad que estamos solos y no estamos solos... Sigamos leyendo: Cuando Naamán se enteró de esto, fue a ver al rey y le contó lo que había dicho la niña. El rey de Siria le contestó: ¡Ve enseguida a Samaria!, ¡Voy a darte una carta para el rey de Israel! Así que Naamán tomó treinta mil monedas de plata, seis mil monedas de oro y diez vestidos. Partió de allí, llevando la carta para el rey de Israel, la cual decía: Te envío esta carta para que sepas que Naamán, general de mi ejército, va de mi parte, y quiero que lo sanes de su lepra Y/o pecados...

Muchos piensan: Con mi dinero lo puedo todo... Con el dinero podemos arreglarlo todo, y SI usted es de esos, permítame decirle que está equivocado, ¿Y por qué digo eso? Porque dice la Biblia: ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor, que hizo los cielos y la tierra, ver Salmos 121:1 al 2... Hermano; Hermana, Dios no necesita nuestro dinero, Dios necesita que nuestro templo y morada del Espíritu Santo esté limpio de pecado. Eso es lo que Él quiere de nosotros, Él no quiere nuestro dinero y Su paz no se compra, Dios es el único que nos puede inundar de Su paz, y Su paz se llama: Jesucristo. Entonces, tengamos mucho cuidado, No pensemos que con nuestras propias fuerzas saldremos victoriosos, saldremos más que vencedores... No, rindámonos como lo hizo Naamán, a Naamán le envió a decir el profeta: Sumérgete siete veces en el rio Jordán, el Jordán es figura de la humillación y cuando Naamán se humilló y cuando Naamán reconoció sus pecados fue liberado, ¿Y por qué siete veces? Porque siete significa: Perfección. Entonces, muchas veces nosotros estamos siendo humillados, pero como te dije al principio: Lo que nos esté sucediendo no es para muerte, es para que nosotros podamos ver la gloria y el poder de Dios, es decir: Para que nosotros podamos ver que donde hay libertad ahí está el Espíritu del Señor, Amén...

Ahora, leamos Proverbios capítulo 9:1, TLA:

La sabiduría hizo una casa y le puso siete columnas labradas...

¿Qué nos está diciendo el proverbista? Construyan su casa, es decir: La morada del Espíritu Santo, con la inteligencia y la sabiduría de lo alto, que está construida con siete columnas que hablan de crecimiento... Nosotros, en nuestro caminar, Tenemos, que crecer... En otras palabras, tenemos que dejar de ser niños espirituales... Dios, muchas veces nos aprieta para que comencemos a usar las armas poderosas que Él nos ha dado para que veamos Su gloria, Y por eso nos dice Hebreos capítulo 6:1, TLA: Por eso, sigamos aprendiendo más y más, hasta que lleguemos a ser cristianos maduros. Dejemos de ocuparnos de las primeras enseñanzas que se nos dieron acerca de Cristo, y no sigamos hablando de cosas simples. Dejemos de hacer lo malo, sigamos a Cristo, y dejemos de pecar para no morir. Ya sabemos que debemos confiar en Dios...

Pueblo bendito de Dios: Maranata, Jesús viene pronto, y viene por una Iglesia sin manchas y sin arrugas. Así que comienza a crecer y deja de estarle apachándole el ojo al pecado... Recuerde, que nosotros somos templo y morada del Espíritu Santo, ver Primera de Corintios 6:19... Recuerde, que usted y yo, somos cartas abiertas, conocidas y leídas por todos los hombres para que sepan que la Roca, llámese: Cristo, habita en nosotros, ver Segunda de Corintios 3.2 al 4... Y este día es un día familiar, y nosotros somos cartas abiertas y como cartas abiertas, tenemos que ser en nuestra casa, ¿El qué? Testimonio, ¿De quién? De Cristo, ¿Para qué? Para que nuestro cónyuge e hijos lo conozcan por medio de nosotros. Nosotros tenemos que manifestar la gloria y el poder de Cristo Jesús... Nosotros tenemos que manifestarle al mundo entero, que Cristo cambia y transforma... Escuche: Los hijos, por muy pequeños que sean, son muy listos, Y conocen nuestras entradas y salidas, aunque usted NO lo crea... Entonces, deja de ser un niño espiritual, y pídele al Señor, que te ayude a crecer Y/o desarrollarte espiritualmente hablando para que puedas aborrecer el pecado...

Hermano; Hermana, perfecciónate en la santidad progresiva... Por tanto, amados, teniendo estas promesas, limpiémonos de toda inmundicia de la carne y del espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios, ver Segunda de Corintios 7:1...

Recuerde, que sin la santidad nadie vera al Señor, ver Hebreos 12:14...

...Así que, mejor, busquemos la perfección en el poder de Dios...

Ahora, leamos Segunda de Corintios capítulo 12:9, TLA:

Pero Dios me ha contestado: Mi amor es todo lo que necesitas. Mi poder se muestra en la debilidad. Por eso, prefiero sentirme orgulloso de mi debilidad, para que el poder de Cristo se muestre en mí...     

Hermano; Hermana, pidámosle al Señor que nos ayude a vivir bajo Su poder, bajo Su gracia... Pidámosle que nos muestre, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, muéstranoslas, por favor, ver Primera de Corintios 2:9, RVR 1960... En otras palabras, pidámosle al Señor, que nos deje ver Su gloria... Escuche: Esta semana que está transcurriendo le he dicho a mi familia lo que yo hago para que mi Fe crezca y NO me aparte del que cambió mi vida y me transformó, les dije: Tenemos que crecer y permanecer en Su fluir, ¿Cómo? Por medio de las experiencias que hemos tenido con Él, es decir: Por medio de Su poder, es decir: Por medio de Su gracia... Bástate mi gracia, RVR 1960... Mire: Nosotros venimos a la Iglesia a recibir instrucción y cuando salimos es para ponerlo en práctica; Dios por Su bondad nos muestra Su poder y Su gloria para que usted y yo, seamos sus testigos. Entonces tenemos que entender que no es con nuestras propias fuerzas, que no es con espada ni con ejército, sino que es con Su Santo Espíritu...

Hermano; Hermana, ¿Quiere ver cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre? Crece, madura espiritualmente hablando... Hermano; Hermana, Dios nos quiere usar como instrumentos de bendición, Y para eso tenemos que estar preparados... Tenemos que tener buenos cimientos; Tenemos que aborrecer el pecado; Tenemos que ser íntegros y tenemos que ser puros para que el bendito Espíritu Santo nos llene de Su poder y podamos ver Su gloria, la gloria y el poder que tiene que habitar y morar en nuestro hogar dulce hogar, pero eso no quiere decir que nosotros tenemos que buscar al enemigo, pero SI él nos busca nos va a encontrar, Y para eso tenemos que estar revestidos, ¿Con qué? Con la armadura de Dios, Y para usarla eficazmente, ¿Qué tenemos que hacer? Crecer, espiritualmente... Hoy, Dios nos está dando la vara de autoridad, ¿Para qué? Para que el mar rojo se abra en frente de nuestros ojos. Así que, no le tengamos miedo a nuestro adversario... Pero, ¿Cuál es la clave? Andar bien afinadito, porque SI no lo estás y te machuca la cola... Por eso consejo: Llenémonos de Su poder, de Su gracia... Bástate mi gracia, RVR 1960... Para que el enemigo, llámese como se llame: Tribulación, angustia, escasez, desnudes o peligro, es decir: Prueba, llámese: Personal, familiar, económica o de salud, No nos asuste o nos tenga arrinconado como el ruso tenía arrinconado a Rocky Balboa en el quinceavo round... Fíjese, que una noche me encontraba durmiendo y tuve un sueño, y no fue sensacional, se me apareció una mujer encapuchada frente a mí y comencé a luchar... Hermano; Hermana, el enemigo vino a robar, y a matar, y a destruir, pero nuestro Señor y Dios vino a darnos vida, y vida en abundancia, ver Juan 10:10... Nosotros tenemos que despertar... Tenemos que salir de nuestro acomodamiento, porque el enemigo nos quiere hacer la vida a cuadritos y por eso, padres y madres, Tenemos que preparar a cada miembro de nuestra familia, porque somos un equipo... Y dice la Biblia: La suma de Tu Palabra es verdad, ver Salmos 119:160... 

En otras palabras: Donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos, ver Mateo 18:20... En otras palabras: Más valen dos que uno solo, pues tienen mejor remuneración por su trabajo. Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero, ver Eclesiastés 4:9 al 10...

¿Qué le quiero decir amado hermano?

Digamos que usted y yo llegamos a la casa, y nuestros hijos, que son espirituales, le dicen a nuestro cónyuge, después de que usted o yo saludamos, Paz a vosotros... Y entramos a la casa, y subimos a nuestro dormitorio, le dice: Nosotros NO miramos bien a mi papá o mamá; Su cara está... Y en eso llega mis hijos con mi amada, y me dice: Ya te hizo tus canelones rellenos, ven a comer y mis hijos: No, mejor oremos por él, porque él no se encuentra bien... Y en eso. Así dice el Señor: No temas, ¿Por qué tienes tanto miedo? No as entendido, que cuando tu levantas tu voz el enemigo te tiembla, ¿Qué le quiero decir? Que Dios te quiere dar una vara... Que el Señor nuestro Dios te ha dado Su vara de poder. Así que, ya deja de estarla escondiendo y levántala cuando el enemigo te quiera matar, robar o destruir... Levanta esa vara de poder y veras como el enemigo huye de ti y de tu casa, porque tu cabeza es la Roca, es Cristo, y Tú eres la cabeza que el Padre y el Hijo utilizan en Su casa, Amén...

Por eso quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor diciendo:

Hay personas que el enemigo los tiene entre la pared, y por eso no pueden soportar la prueba, a pesar de que Dios no nos pone pruebas que no podamos soportar... Hermano; Hermana, el Señor quiere ayudarte a vencer tus pruebas... Dios quiere vencerlas por ti...

...Dios, quiere hacerte libre, Créelo...

Y SI eres de los que está pasando por alguna prueba que no puedes superar... Recuerda, que más grande es nuestro Dios y que Dios no te va a dejar, Dios no te va a desamparar, Amén...

Por eso Señor, te pedimos, en el nombre de Jesús, que nos ayudes a no temerle al enemigo, Y te lo pedimos, porque sabemos que Tú Señor eres el que peleas nuestras batallas, batallas como: La división, la contienda, la ira, la mentira, el orgullo y el desamor... Señor, nosotros sabemos que sin Ti no somos nada y que sin Ti no podemos hacer nada. Y por eso, te pedimos, en el nombre de Jesús, que saques de nuestra vida y de nuestra bendita casa el desprecio y el rechazo, y todo espíritu de orfandad, de enfermedad, de soledad, de depresión y de muerte... Señor, en el nombre de Jesús, aumenta nuestra Fe, aumenta nuestras fuerzas y permite que nuestros ojos puedan ver más allá de lo que apunta nuestra nariz, para que podamos entender, que son más los que están con nosotros que los que están en nuestra contra... Nosotros no somos huérfanos... Nosotros tenemos un Padre, que se llama: El Todopoderoso y que también se llama: Jehová de los ejércitos y Jehová de los ejércitos está velando por todos nosotros. Así que, no temamos, seamos libres pues a libertad nos ha llamado el Señor nuestro Dios, Amén, Amén y Amén...

¡Y que la gloria del Señor nuestro Dios sea en nosotros, Amén!


29 de octubre de 2022


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