¿POR QUIÉN Y POR QUÉ MURIÓ JESÚS?
LA BIBLIA NOS HABLA:
“En
esto consiste el amor: No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él
nos amó a nosotros y envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados.” (Primera de Juan 4:10)
En este día
quisiera comenzar esta maravillosa enseñanza del Rey de reyes, preguntando:
¿Por quién o
por quienes vino, realmente, Jesús a la tierra?
Dice la
Palabra en el libro de Mateo:
Y
respondiendo Él, dijo: No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa
de Israel, ver Mateo 15:24...
Nuestro
Señor Jesucristo, fue el que hizo esa declaración, ¿Usted cree, que cuando
manifestó Jesús esa declaración estaba tirando simplemente palabras al aire?,
¿Usted cree que
Jesús vino solamente por las ovejas perdidas de la casa de Israel?
O Será más
bien que el que escribió sobre las ovejas perdidas, sabía perfectamente
bien lo que estaba diciendo, cuando dijo: Los que necesitan del médico son
los enfermos, No los que están sanos, ver Mateo 9:12 TLA... Quizás alguien se esté diciendo en este
momento: Un momento hermano, ¿En dónde dejamos a Juan 3:16?; Como en todos los
juegos de Base ball, ponen el letrero detrás de la base, Juan 3:16...
Porque de tal manera
amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en
Él, no se pierda, más tenga vida eterna...
Según el
libro de san Juan capítulo 3:16, Jesús vino por el mundo... Pero, ¿Quiénes eran
los capitanes que fueron enviados para el mundo? Nada más y nada menos que las
12 tribus de Israel; Ellos fueron enviados hacia el resto de las naciones, pero
ellos no hicieron su trabajo. Dejaron caer la bola, se quedaron con los
mandamientos, se quedaron con la luz cuando Dios les dijo: Tienen que compartir
la luz con las naciones. David, el rey David, el hombre que tenía el corazón
semejante al de Dios nos lo deja ver en el libro de los Salmos:
Lámpara es a
mis pies tu palabra, y luz para mi camino, ver Salmos 119:105...
Pero ellos (La
casa de Israel), dejaron la luz para ellos mismos y luego se deshicieron de esa
luz, Y tomaron la luz de otras naciones. Entre paréntesis, ¿Qué luz nos esta
iluminando? Pero ese no es el punto, aunque no lo tenemos que obviar; Tenemos
que evaluarnos, el punto es que el pueblo de Israel se dedicó a servir a otros
dioses, por eso Dios se deshizo del reino del norte; Lo regó por todo el mundo,
pero también le prometió que los volvería a traer,
Y el Señor
os dispersará entre los pueblos (Por su idolatría), ver Deuteronomio
4:15 al 31, Por eso dile a la casa de Israel hijo de hombre: Así dice el
Señor Dios: He aquí, tomaré a los hijos de Israel de entre las naciones adonde
han ido, los recogeré de todas partes y los traeré a su propia tierra. Y haré
de ellos una nación en la tierra, en los montes de Israel; Un solo rey será rey
de todos ellos; Nunca más serán dos naciones, y nunca más serán divididos en
dos reinos, ver Ezequiel 37:21 al 22... Pero, ¿Cómo los volvería a traer el
Señor hacia Él? A través de nuestro Mesías... Escuche como lo hace:
Tengo otras
ovejas que no son de este redil, ¿Cuál es ese redil? La casa de Juda, el
pueblo judío; A esas también me es necesario traerlas, ¿A quién? Al
reino del norte, a la casa de Israel, y oirán mi voz, y serán un rebaño con
un solo pastor, ver Juan 10:16...
...Jesús, murió
por el reino del norte y por el reino del sur; Por ambos...
Y eso lo profetizó
hasta Caifás, el sumo sacerdote... Lo que profetizó Caifás, probablemente es
una de las profecías más importantes de todo el Nuevo testamento,
Ahora bien,
no dijo esto, ¿Quién? Caifás, de su propia iniciativa, sino que
siendo el sumo sacerdote ese año, profetizó que Jesús (Bajo el Espíritu
Santo), iba a morir por la nación (Por el Israel judío del siglo I),
y no solo por la nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios
que están esparcidos, ver Juan 11:51 al 52...
La casa de
Israel está esparcida por todas las naciones... Eso no se puede negar y eso hasta
lo profetizó el sumo sacerdote Caifás, el profetizó: Que Jesús no iba a morir
solamente por el pueblo judío, sino que también iba a morir por los hijos de
Dios que están esparcidos por todo el mundo... Pero, ¿Para qué? Para que se
cumpliera la profecía del profeta Ezequiel en su libro, en el capítulo 37:21 al
23, que dice:
Diles: Así
dice el Señor Dios: He aquí, tomaré a los hijos de Israel de entre las naciones
adonde han ido, los recogeré de todas partes y los traeré a su propia tierra. Y
haré de ellos una nación en la tierra, en los montes de Israel; Un solo rey
será rey de todos ellos; Nunca más serán dos naciones, y nunca más serán
divididos en dos reinos. No se contaminarán más con sus ídolos, ni con sus
abominaciones, ni con ninguna de sus transgresiones; Sino que los libraré de
todos los lugares en que pecaron y los limpiaré. Y ellos serán mi pueblo y yo
seré su Dios... Y esto lo podemos ver por medio de la Biblia, que se
refiere a la casa de Israel, Se refiere a las ovejas perdidas...
Dios se
divorció del reino del norte,
Debido a su
rebeldía, a su infidelidad, a su adulterio, Él la despidió, dándole carta de
divorcio; Pero Judá, la infiel hermana de Israel, no tuvo temor, sino que
también ella fue y se dedicó a la prostitución, ver Jeremías 3:8 DHH...
Toda la casa
de Israel fue divorciada, ¿Por qué? Porque se prostituyó (Idolatró), con todas las
naciones... Y es aquí en donde surge la pregunta de los 20 pesos:
¿Usted cree
qué Dios se va a casar nuevamente con el reino del norte?
Hablemos del
reino del norte, dice la Palabra en el libro de Jeremías capítulo 3:1:
Si un hombre
se divorcia de su mujer, y ella se va de su lado y llega a ser de otro hombre,
¿Volverá él a ella?, ¿No quedará esa tierra totalmente profanada? Pues tú eres
una ramera con muchos amantes, y sin embargo, vuelves a mí, declara el Señor...
Este es un grandísimo
problema, por eso es llamado: El gran misterio, porque el mismo Padre está
diciendo a través de los profetas: Voy a dispersar al reino del norte. Lo voy a
regar por todas las naciones, pero cuando me busquen con todo su corazón y
con toda su alma me hallaran y escucharan mi voz, ver Deuteronomio 4:29 al
30... Entre paréntesis, nosotros aun no somos perfectos, pero tenemos que tener
presente, que SI pecamos NO nos tenemos que sentir acusados, ni juzgados, ni
condenados... Recuerde:
Que SI
alguno de nosotros peca, Abogado tenemos para con el Padre, a nuestro Señor Jesucristo
el justo,
ver Primera de Juan 2:1...
Pero eso no
nos da la libertad para que practiquemos el pecado... Recuerde: Que nosotros,
tenemos que ser santos como nuestro Señor de señores, pues escrito esta:
Sed santos,
porque Yo soy santo, ver Primera de Pedro 1:16...
Pero ese no
es el punto, aunque no lo tenemos que obviar, el punto es que Dios al pueblo de
Israel, le va a restaurar todo su bienestar y los va a reunir de todas las
naciones, y de todos los lugares por donde los disperso, ver Jeremías
29:14... Los que conocen la Tora, saben perfectamente que eso no es posible; Cuando
Dios, el Padre, se divorcia de su esposa (Israel), Ella no puede volver jamás a
Él... Escuche lo que dice Jeremías:
Si un hombre
se divorcia de su mujer, y ella se va de su lado y llega a ser de otro hombre (Lo cual es
lo que estaba haciendo el pueblo de Israel), ¿Volverá él a ella?, ¿No
quedará esa tierra totalmente profanada? El reino del norte está
completamente profanado; Sin embargo, Él, Dios, le dice: Tú eres una ramera
con muchos amantes, y sin embargo, vuelves a mí, declara el Señor, ver
Jeremías 3:1...
Esto SI es
un gran problema, porque el libro de Deuteronomio nos da el mandamiento que
está contradiciendo lo que dice el profeta Jeremías (Jeremías 3:1)... Escuche:
Cuando
alguno toma una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable
porque ha encontrado algo reprochable en ella (Hablando de
fornicación), y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la
despide de su casa, y ella sale de su casa y llega a ser mujer de otro hombre si
el segundo marido la aborrece y le escribe certificado de divorcio, lo pone en
su mano y la despide de su casa, o si muere este último marido que la tomó para
ser su mujer al primer marido que la despidió no le es permitido tomarla
nuevamente como mujer, porque ha sido menospreciada; Pues eso es abominación
ante el Señor, ver Deuteronomio 24:1 al 4...
Entonces imagínate a ti mismo, eres judío del primer siglo, eres Pablo, el apóstol, que estudió bajo la enseñanza de Gamaliel y tienes esas escrituras memorizadas, Y además te acuerdas de todas las Escrituras que dicen, que Dios se va a divorciar del reino del norte; Tú sabes, inmediatamente, que el reino del norte no se puede volver a casar... Eso no es posible, Se acabó, Ellos empacaron sus maletas y se las pusieron en sus hombros, y no dejaron que la puerta los golpeara, y fue por eso que dijo Flavio Josefo, el historiador judío romano del primer siglo, dijo: El pueblo de Israel que está al otro lado del rio Éufrates ya no puede ser parte del pueblo de Dios, ni siquiera lo escuchen, porque la tribu de Juda, los judíos, el cual estaba compuesto del Israel moderno en esos días, No los dejaba, porque ellos conocían la Tora, la ley de Dios... Yo creo que ellos les decían: Ustedes ya no pertenecen más a Israel; Ustedes perdieron su identidad, fueron divorciados; Nosotros la embarramos fuimos deportados a Babilonia, pero pagamos nuestra deuda y regresamos, Y ustedes se asimilaron entre todas las naciones, se prostituyeron y el Padre los divorció, Ustedes NO pueden volver, No importa lo mucho que quieran volver, pero por el derecho los dejaremos volver, pero para eso se tienen que convertir al reino del sur, ¿Cuántos creen ustedes que lo hicieron? Pocos o mejor dicho: Ninguno, ¿Por qué razón? Porque el reino del norte y el reino del sur eran como el agua en el aceite, no se pueden mezclar, cuando el rey Salomón, hijo del rey David, estaba reinando sobre el reino del norte y sobre el reino del sur, siempre estaban empleitados... No existía la manera de que un israelita del reino del norte se convirtiera a Juda... Ellos tenían su propia identidad, muy pocos lo hicieron; Era más fácil que un gentil, que un pagano, que una persona que no era parte del pueblo de Israel se convirtiera a Juda a que lo hiciera un israelita del reino del norte... Entonces, Houston, tenemos un gran problema, el reino del norte no se puede volver a casar con Dios, No pueden regresar a la casa del Padre, ver Juan 14:1 al 2, según lo que dice el libro de Deuteronomio capítulo 24:1 al 4, Y digo según, porque el apóstol Pablo nos desenreda este misterio. Hay muchos misterios en la Biblia y yo creo que este es uno de los mayores, es decir; De como Dios arregla para que el reino del norte pueda volver a Él, porque la Biblia nos muestra que Dios los invita a que regresen a Él, lo cual aparenta estar en contra de su propia ley hasta que llegamos al libro de Romanos capítulo 7... Este es uno de los capítulos más increíble de toda la Biblia y es en este libro en el que Pablo dice:
Pues no hago
el bien que deseo, sino que el mal que no quiero, eso practico, ver Romanos
7:19... Este capítulo es un enredo, Y comienza de una manera muy extraña:
¿Acaso
ignoráis, hermanos (pues hablo a los que conocen la ley, No pueden
leer el resto de este capítulo, sino conocen la ley de Dios, ¿Y por qué creen,
que Pablo les está diciendo eso?, Porque lo que él les va a revelar solo lo
pueden encontrar en la Tora y si ellos, y nosotros no entendemos la Tora no
vamos a entender lo que Pablo nos quiere decir; Nos va a resultar muy confuso,
No vamos a leer realmente lo que está encriptado ahí... Entonces, yo, el
apóstol Pablo los voy a ayudar diciéndoles: Lean la Tora primero antes de leer
Romanos capítulo 7, pues él ahí dice que la ley tiene jurisdicción sobre una
persona mientras vive, ¿Por qué? Porque la ley está sujeta a los que
viven; Están sujetados a las penalidades, que la ley demanda. Leámoslo: Pues
la mujer casada está ligada por la ley a su marido mientras él vive; Pero si su
marido muere, queda libre de la ley en cuanto al marido. Así que, mientras vive
su marido, será llamada adúltera si ella se une a otro hombre, ¿De dónde saco
eso el apóstol Pablo?, ¿De la manga de su camisa? No, del libro de Deuteronomio
capítulo 24, por eso recalco: Hablo a los que conocen la ley... sigamos
leyendo: Pero si su marido muere, está libre de la ley, No puede ser
llamada adultera, porque no está ligada a su marido, de modo que no es
adúltera aunque se una a otro hombre...
Eso quiere
decir que cuando un marido muere, la esposa se puede casar con otro, pero SI su
marido está vivo y ella se casa con otro hombre comete adulterio... El Antiguo
Testamento nos muestra que una mujer se puede casar con otro hombre por medio
de dos vías… Primera: Por medio de la muerte... Segunda: Cuando recibe carta de
divorcio, en la comunidad mesiánica, hay mucha confusión por eso, pero SI la
mujer recibía una carta de divorcio se podía casar nuevamente y no cometía
adulterio (No estaba en pecado)... por otro lado, SI la despedían sin darle
carta de divorcio, no se podía casar y SI se casaba estaba en adultero, por eso
es que la mayoría de los hombres no se casaban SI la mujer no le mostraba una
carta de divorcio, pues ellos no querían estar en adulterio... sigamos leyendo:
Por tanto, hermanos míos, también a vosotros se os hizo morir a la ley por
medio del cuerpo de Cristo, ¿De qué ley nos está hablando el apóstol Pablo?
De la ley del adulterio, Pablo, el apóstol, nos está mostrando por medio del
libro de Jeremías capítulo 3:1, lo que significa realmente la profecía que
aparece en el libro de Deuteronomio capítulo 24:1 al 4... Pablo, el apóstol, nos
está mostrando la profecía que profetizo el Señor Jesucristo en el libro de Juan
capítulo 10:16: Yo tengo otras ovejas que no son de este redil, y
también a las del reino del norte me es necesario traerla, aunque según
el libro de Deuteronomio capítulo 24:1 al 4, estaba casada y se prostituyo con
las naciones y por eso no podía volver, pero Pablo lo entendió, y dijo:
Por tanto hermanos míos también a vosotros se les hizo morir a la ley por medio
del cuerpo de Cristo, ¿El cuerpo muerto o el cuerpo vivo? El cuerpo
muerto, para que seáis unidos a otro, a aquel que resucitó de entre los
muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios...
Resumamos y
analicemos:
¿Quién era
el novio, el esposo de Israel? Dios,
¿Por qué se divorció
Dios de Israel? Por adulterio (Idolatría), y según el libro de Deuteronomio
capítulo 24:1 al 4, ¿Podía una adultera volver con su primer marido? No...
¿Cómo se le
llama a la mujer que engaña a su esposo? Adultera, y según el libro de Romanos capítulo
7, ¿Cuál es la única forma que existe de que una mujer se puede liberar de la
ley del adulterio? Por la muerte de su primer marido,
¿Están
listos para la mayor historia de amor de todos los tiempos?
¡Hermanos,
el novio murió por su novia!, ¡Jesús murió por su Iglesia!
Estas son
las buenas nuevas... Este es el misterio que el apóstol Pablo nos está tratando
de explicar... Este es el misterio que los patriarcas y los ángeles trataban de
entender en los cielos... Yo me los imagino; El Padre les está diciendo: Me voy
a divorciar, pero los dejaré volver, y ellos se miran entre SI y se dicen: Quien
le quiere decir a Dios, que Él no puede hacer eso; Nadie lo entendió, pasaron
años, y años, y años, pero el Padre sabía como iba a arreglar este asunto... Si
alguna vez te preguntaste y no te pudiste contestar esta respuesta:
¿Por qué murió
el Cordero de Dios por nosotros?
Fue por eso.
El Cordero tuvo que morir para liberar a la novia del adulterio... Y es aquí
amado, en donde surge nuevamente la famosa pregunta de los 20 pesos:
¿Por qué
tuvo que resucitar el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo?
Porque SI en
toda la ley de Dios no hay ningún sacrificio que requiere que el animal resucite
y se levante para la propiciación del pecado, porque la propiciación del pecado
es encontrada en la sangre, No en el respiro... Entonces, en el momento en que Jesús
murió fue el momento en el que nosotros fuimos perdonados según la ley de Dios...
Entonces, ¿Por qué tuvo que resucitar Jesús? Porque Dios, el Padre, le tenía
que crear a su novia (Israel), un novio elegible con quien se pueda casar, Y
fue por eso que Cristo Jesús se levantó de entre los muertos... Él les está
diciendo, Él nos está diciendo: Aquí estoy, aquí estoy, escógeme a mí, ya no
sigas practicando el pecado, ya no sigas caminado en el mundo, ya no sigas
caminando entre las naciones, Yo el Gran Yo soy, te he reconciliado con
mi Padre y mi Padre es santo, por eso sed santo como nuestro Padre es santo...
Yo el Gran Yo Soy, he roto la maldición. La maldición, que el reino del
norte no podía regresar, y Juda sabia eso... Entonces cuando el apóstol Pablo
va a los elegidos; Va a los que se encontraban dispersos en Galacia, en Éfeso, en
Roma, en las naciones, cuando él entra a las ciudades, pregunto:
¿A quiénes
cree usted que tenía que ir primero el apóstol Pablo?
Bueno, según
la Biblia, Pablo tenía que ir primero a los gentiles, después a los reyes y
por último a la casa de los hijos de Israel, ver Hechos 9:15, pero ese no
es el tema, el tema es que el apóstol Pablo primero fue a la casa del reino del
norte (Sinagogas), diciendo: Ustedes, Rubenitas, levitas, danitas, efranitas; Todos
ustedes gentiles, que han perdido su identidad y NO les importa, les tengo
buenas nuevas: Pueden volver,
¿Y aquí está el por qué? Escuchen:
Porque el Dios
del universo, que divorció a sus ancestros y a sus hermanos por su rebeldía,
por su idolatra, por sus pecados e iniquidades, les envió a su Hijo, a Su
Unigénito... Les envió al novio (Jesús), para que diera su vida. Él murió y
resucitó para que ustedes: Reino del norte se puedan unir a Dios Padre y no
solo ustedes, sino también todos los gentiles, es decir: Los paganos e
incircuncisos, que estaban excluidos del reino de Dios, es decir: Los que
vivían en este mundo sin Dios y sin esperanza, pero ahora han sido
unidos a Dios por medio de Cristo, ver Efesios 2:11 al 16, es
decir: Del Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, ver Juan
1:29... Y de esto es que se trata las cenas de las bodas del Cordero, y por eso
es que las cenas de las bodas del Cordero existen, Gloria a Dios...
Por eso
quisiera terminar esta maravillosa enseñanza del Señor de señores diciendo:
Indiscutiblemente,
Dios es bueno y severo... Severo para con los que cayeron y bueno para
con los que permanecemos en su bondad, ver Romanos 11:22... Dios es bueno con nosotros... Dios rechazó a
su pueblo. Bueno, NO lo rechazó, lo puso en pausa para que usted y yo amado
hermano, nos reconciliemos con Él y alcancemos la salvación, es decir: La vida
eterna, ver Romanos 11:25... Dios tomó la iniciativa al enviar a su Hijo a morir
en la cruz del Calvario. No solo por su pueblo, sino también por nosotros; Él estaba
pensando en nosotros cuando envió a Jesús, Su Hijo; Él nos conoce y nos ama por
siempre, y para siempre, Amén...
Indiscutiblemente,
Dios es bueno y nos ama...
Y
nosotros hermano, ¿Cómo somos con Él?...
¿Somos
agradecidos?, ¿Lo amamos como Él nos ama? Y SI lo amamos como Él nos ama. Pregunto:
¿Por qué desobedecemos Su Palabra?, ¿Por qué le permitimos al mundo, que nos
absorba?, ¿Por qué no valoramos, realmente, lo que Él hizo por nosotros?,
¿Por qué no
doblegamos nuestra voluntad a la voluntad de Él?,
Él, entregó a
la muerte a su Hijo por amor a nosotros,
Él le puso una
pausa a su pueblo... Pero, ¿Para qué?
Para que nos
reconciliáramos con Él... Para que recibiéramos vida y vida eterna al lado de
Su Hijo, ¿Y qué hacemos nosotros? Será que decimos lo que dice el apóstol
Pablo:
Porque para
mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia, ver Filipenses 1:21
RVR 1960, Entonces, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos, para el
Señor morimos; Por tanto, ya sea que vivamos o que muramos, del Señor somos,
ver Romanos 14:8...
¿Será, que
eso es lo que declara nuestro corazón?
O será más
bien que nosotros seguimos más los deseos de la carne; De la corriente de este
mundo. Los tiempos que estamos viviendo, según la Biblia, ya son más finales
que nunca; Los tiempos que estamos viviendo, son tiempos para reflexionar, son
tiempos para evaluarnos... Son tiempos para pararnos en los caminos y mirar,
y preguntar por los senderos antiguos, preguntar por el buen camino, y andar
por él... Pero, ¿Por qué y para qué? Para que hallemos descanso para
nuestra alma, ver Jeremías 6:16; Necesitamos descansar, ¿Y en quien tenemos
que descansar?...
¿En quién tenemos que reposar? En el Cordero de Dios...
Venid a mí,
todos los que estáis cansados y cargados, y yo os hare descansar. Tomad mi yugo
sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y
hallareis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es fácil y mi carga
ligera.,
ver Mateo 11:28 al 30... Pero, ¿Para qué necesitamos descansar en el Cordero de
Dios? Para que podamos buscar y encontrar la paz con todos y la
santidad, sin la cual nadie vera al Señor, ver Hebreos 12:14... En otras
palabras, para que cuando Él (Cristo), se manifieste, no
seamos avergonzados en su venida, en su Parusía, ver Primera de Juan
2:28...
¿Cuántos deseamos
ser arrebatados?
Entonces, ¿Qué tenemos que hacer? Evaluar nuestro caminar y arrepentirnos. Recuerda, que cuando éramos pecadores, Cristo murió por nosotros, ver Romanos 5:8... Dios nos ama, aunque le fallemos. Su amor es incondicional y no tiene límite; Él desea, que todos lleguemos al arrepentimiento... Él está listo para perdonarnos, restaurarnos y protegernos de los peligros del mundo... Él desea que nosotros nos reunamos con Su Hijo en las nubes.
29 de mayo
de 2021
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